Vivimos como suizos
Ven en coche
Lo mejor de la nueva campaña de la DGT es que no puedes hacer ni un chiste
Y también me pone cuarto y mitad de 'El hormiguero' (10/7/2023)
Filósofas a la greña (9/7/2023)
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Iniciar sesiónHarta de tanta propaganda electoral, pagada o gratuita, hay que ver lo buenos que son los anuncios de la DGT. Esta vez sí. Quizá mi baremo no sea adecuado ni científico porque se basa en que no se puedan hacer chistes. Y con estos ... anuncios en los que aparece el muerto sentado en el sofá al lado del que ha provocado la muerte no se me ocurre ninguno. Acuérdense de la campaña en la que el actor Eduard Fernández y la cantante Amaia eran atropellados. Justo antes nos alertaban de los peligros en la carretera. Todo era muy serio. Nos decía Amaia que no llegábamos a ser conscientes de la cantidad de accidentes que había hasta que le tocaba a «tu hermana, tu hijo o algún famoso». Pero el anuncio se iba a tomar por saco con el meme que sacaron de Belén Esteban, que era la que atropellaba a Amaia utilizando unas imágenes de ella conduciendo en 'Sálvame' con Toñi de Azúcar Moreno. «Ahí está», se oía a Belén. Se utilizaba la imagen del atropello a Amaia en el anuncio de la DGT y parecía que ellas se hubieran llevado por delante a la cantante. Belén: «Por ahí no se puede cruzar. Es que es acojonante. Luego dicen que pasan cosas».
En 1973 había un anuncio de Renfe que se resumía en «Papá, ven en tren». Un padre se marchaba de viaje y cuando se iba a despedir con un beso de los hijos que estaban durmiendo, a los tres les salía un globo o burbuja de diálogo como en los tebeos donde se leía lo de «Papá, ven en tren». Entonces pasaban dos o tres días y el padre volvía en un tren al que se le bajaban las ventanas y en el que podría haber llegado también Ana Karenina. Pero es que no hay que ir a 1973. Si echas un vistazo en RTVE.Play al primer capítulo de 'Chicas de hoy en día' (1991) ves cómo Carmen Conesa llega de Barcelona a Madrid en un tren que parece del Oeste.
Qué vamos a decir de los trenes de hoy en día. Por ejemplo, que se pueden parar en medio de la nada (antes de llegar ni siquiera a Ciudad Real) a lado de otro de colorines Iryo donde puedes leer 'Agenda 2030' y donde quizá te traten de tú. De tú o de usted, ambos parados dos horas por «avería en la infraestructura», aunque siempre pienso que ha pasado algo que no cuentan. Que algún anakarenino se ha tirado al tren, con lo que eso supone de trastorno. Digo trastorno como aquel aviso que llegó a un amigo médico hace años. «A mi marido le ha dado un trastorno», dijo una señora desde una casa de la huerta al llamar a Urgencias. Cuando el médico llegó el trastorno consistía en que se había colgado.
A ver, no voy a decir que los trenes ahora no sean mejores que antes. Sería como decir que las mujeres no vivimos ahora mejor que nunca. Pero los trenes, cosa que no pasaba hace diez años, son hoy bastante antipáticos. El lujo es el coche. Que te lleven. Nadie quiere un anuncio de sofá y sangre. Pero, hijos que no tengo, si puedo, pienso ir en coche.
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