Gastad formalidad

En la investidura, reírse a propósito de Machado y de un cantautor ha sido el colmo de lo desquiciados que estamos. El poeta más triste. Contó Elena Garro en 'Memorias de España 1937' que ella y Octavio Paz visitaron a Machado en Valencia. «Entramos a una casa de portón grande, jardín descuidado y aromas diluidos de reciente verano… Una tristeza impresionante se extendía por toda la casa: se diría abandonada o habitada por personas sin esperanzas. Apareció Antonio Machado vestido de negro, con un traje muy usado, sonrió, pero de una manera muy diferente a la sonrisa que los demás nos regalaban, se diría que sonreía con resignación». Lo sorprendente que ha provocado risas ha sido el carril bici. Porque parece que entre los derechos conseguidos que la derecha amenaza está el carril bici. Y la bancada del PP, animada por González Pons, se reía cuando Sánchez clamaba contra esos ayuntamientos del PP y Vox quitando derechos y carriles. «Seriedad y un poco de respeto», pedía Armengol, como cuando las monjas nos decían en el colegio lo de 'Gastad formalidad' (y claro que decían «gastar formalidad»). Evelyn Waugh se rio de su amiga Nancy Mitford. Que eso del lenguaje adecuado (U o no U, de la clase alta o no) se utilizaba para identificar a los NLO ('not like one', que no son como uno). O sea, que eran prejuicios y creerse superior. El muro que ha levantado Sánchez. Aunque soy más de Bambino y esa maldita pared que separa tu vida y la mía.