Suscribete a
ABC Premium

TIRO AL AIRE

Esta casa es una ruina (versión Moncloa)

Hay cuestiones que irremediablemente se deben afrontar en el momento, con el gasto de tiempo y dinero que conllevan

Ha dimitido una

La ciudad es más joven que nosotros

María José Fuenteálamo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

No sé si sucede en todas las familias, pero estos últimos veranos compruebo que hay una serie de problemas que, no se sabe por qué, terminan implosionando a las puertas de vacaciones. Son las típicas complicaciones que te amargan mientras esperas con impaciencia que llegue ... el día. Está ese ruidito en el coche que ignoraste porque no tenía por qué ser grave pero que justo el fin de semana empezó a sonar horrible. El lunes a primera hora llamas al taller, rezando para que no sea nada o si lo es que haya piezas o al menos mano de obra, porque ya es final de julio y todos los clientes igual y encima estamos a medio gas. Algo parecido te sucede con ese dolor cervical que seguro que se cura solo, si no es más una molestia leve, pero ahora no te deja ni dormir. De modo que, sí o sí, necesitas cita con el 'fisio' y veremos a ver si hay hueco porque si no está ya de vacaciones está a punto y con la agenda a tope y te preguntas por qué hay tanta gente igual estas semanas. Podemos hablar de cómo se ha complicado en el baño ese goteo del lavabo que parecía una tontería hace unos meses, pero justo esta mañana había visto un charco y hay que llamar de urgencia al fontanero –que por supuesto, tiene más lista de espera que un restaurante de moda en Madrid de septiembre a junio–. Eso, o cierras la llave de paso y ya verás qué gracia cuando volvamos en septiembre y tengamos que enfrentarnos a todo lo que dejamos sin hacer…

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia