Suscribete a
ABC Premium

UNA RAYA EN EL AGUA

Ley de acceso a TU vivienda

El amparo legal al impago y a la patada en la puerta convierte la seguridad jurídica en una abstracta reliquia burguesa

Derogaciones y subrograciones (27/4/2023)

El publicista frustrado (26/4/2023)

Ignacio Camacho

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una ley de Vivienda impulsada e inspirada por la extrema izquierda sin autorizar expropiaciones resulta casi motivo de sospecha. Hay truco. Y consiste en que la norma no necesita incautar casas porque lo que de verdad expropia son derechos, el de libertad de mercado ... y el de propiedad privada en concreto. El proceso expropiatorio, al fijar una compensación aunque sea baja, no deja de reconocer al individuo como dueño de su finca urbana y obliga al Estado a comprársela; en cambio la intervención de los precios del alquiler y las facilidades a la okupación (con la k que le confiere una dimensión revolucionaria) la enajenan de facto sin tener que pasar por engorrosas rutinas burocráticas. Los trámites, las molestias, incluso los gastos de esa transmisión real de uso corren por cuenta del propietario, incapacitado en la práctica para disponer libremente de su posesión y para instar la ejecución de un desahucio, obligado a soportar la morosidad e inerme ante una eventual invasión que, en el mejor de los casos, sólo podrá revertir con un reclamación judicial cuya gestión puede demorarse años.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia