Siendo evidente que no hay turbinas averiadas ni excusas falsas en el gasoducto ruso hacia el centro de Europa, y que Vladímir Putin solo está castigando a los países que colaboran con Ucrania cortándoles el gas, solo cabe concluir que la guerra económica de Rusia ... contra el mundo entra en una nueva fase a las puertas del otoño, y del frío. Putin corta el gas y su petróleo deja de llegar a Europa por las sanciones al Kremlin. Y ahora, añade una nueva provocación, y amenaza con cortar la exportación del grano ruso para cortocircuitar el mercado alimentario en busca de racionamientos y hambrunas. Rusia se ha propuesto asfixiar a Europa y extender su guerra militar contra Ucrania con una guerra económica global contra Occidente, que lamentablemente le está dando resultado. Es China quien salva las carencias de Rusia en política monetaria, y a cambio es Europa quien se empieza a fragmentar en su unidad respecto a las sanciones. Al menos Hungría ya ha amenazado con ello. Putin solo cumple su guion.
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