CABEZA FRÍA

Puigdemont hace las maletas... para volver

El 'expresident' fugado está decidido a poner el pie en España en cuanto la amnistía se publique en el BOE. Cree que nadie se atreverá a detenerle

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18/05/2024 a las 19:16h.

Carles Puigdemont cuenta los días que le quedan para regresar a Cataluña. El momento se acerca en su cabeza porque está dispuesto a regresar en cuanto el Boletín Oficial del Estado publique la amnistía. Algo que puede suceder en tan solo doce días, el ... próximo 31 de mayo. La ley es clara. Si pisa España antes de que los tres jueces que llevan sus causas apliquen la nueva ley y dicten que sus delitos quedan borrados será detenido. Pero el expresidente fugado dice estar convencido de dos cosas. La primera es que si vuelve cuando la amnistía entre en vigor nadie se va a atrever a detenerle, aunque los jueces intenten suspenderla con una cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de la UE, una cuestión de constitucionalidad ante el TC o ambas.

Puede ser una fanfarronada de Puigdemont. Puede que llegue el día y no se atreva. Pero este catalán ya ha demostrado que el marco legal no es algo que le achante y que lo suyo es echarle pulsos al Estado con Europa entera mirando y con miles en las calles saliendo a recibirle. ¿Habrá detención siendo ése el escenario? Si la respuesta es no, el expresidente fugado está en lo cierto. Si la respuesta sigue siendo «sí, se le detendrá», la siguiente pregunta es ¿cómo?. ¿En medio de un baño de multitudes a lo Tarradellas? ¿Quizá tres días después, cuando se haya agotado el clamor en las calles? ¿Tiene entonces Puigdemont margen para regresar entre vítores e irse de nuevo en un maletero si la cosa se pone fea?

El segundo convencimiento de Puigdemont entronca con el primero a través de esta pregunta: ¿Volver para qué? Para ser presidente de la Generalitat. Este es un escenario que no se cumplirá porque Pedro Sánchez no sacrificará a Salvador Illa. Sin embargo, en su delirio –y el de algunos aduladores que le rodean– Puigdemont cree que de verdad tiene opciones de volver a ser 'president', cuando como máximo protagonizará una investidura fallida.

Y cuando esto suceda ¿Se retirará o se aferrará a la política? Dos preguntas que se contestan con otra ¿alguien ve al expresidente regresado de una fuga victoriosa reconvertido en portavoz del Parlament para preguntar a Salvador Illa sobre plantas de automóviles, sequía o plazas de enfermeras? Entre esta opción y vivir el resto de su vida a cuerpo de rey con todos los privilegios de haber sido presidente catalán, parece probable que se incline por esto último. Quizás no sea una retirada inmediata y le lleve unas semanas o meses. Pero la tentación de instalar un despacho en su Gerona natal con secretaria, asesores, chófer, coche y seguridad pagados más un suculento sueldo público parece demasiado fuerte.

¿Y Puigdemont encajará como si nada el golpe? ¿No romperá con Pedro Sánchez enfadado porque no le deje ser 'president'? No. Al menos en el próximo año y medio con las posibles cuestiones prejudiciales y de constitucionalidad abiertas. Después, ya veremos. De momento le tenemos haciendo las maletas.