Polideportivo
La importancia de tener un buen culo para triunfar en el golf
Los glúteos son los músculos más grandes del cuerpo y cruciales para un buen 'swing'
Jon Rahm, la clave para la resurrección
Madrid
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Iniciar sesiónPara los detractores del golf, que hablan desde el desconocimiento, esta actividad física no es un deporte. Sería más bien un paseo por un jardín dando golpes a una bolita. Sin embargo, la realidad es muy diferente. Se trata de una disciplina muy exigente ... que requiere una preparación física del más alto nivel, sobre todo si se habla de profesionales. Son auténticos atletas que dedican gran parte de su jornada al ejercicio, aparte de a la técnica. «Yo hago una promedio de hora y media de gimnasio al día -explica Rafa Cabrera, uno de los hombres más en forma del circuito- y eso que ahora con cuarenta años ya he bajado un poco la intensidad. Pero en esta profesión no puedes estar en mala forma porque entonces no aguantarías ni un minuto con toda la competencia que hay».
Dentro de esa preparación hay unas zonas del cuerpo más importantes que otras, como sigue explicando el canario. «Los glúteos son fundamentales porque le quitan mucho peso a la espalda y te ayudan a dar mucha potencia. Pero también depende del 'swing' de cada uno, porque hay gente que genera más velocidad con su su giro sintiendo que empujan al suelo y otros con su movimiento de manos. Lo ideal, es una combinación de las tres, pero para mí la clave es que tenga la movilidad que pueda desarrollar».
Un ejemplo de este conocimiento propio lo expone Josele Ballester, la nueva perla del golf español, reciente vencedor del U.S. Amateur. «Yo acabo este año la carrera de Ciencias del Deporte y más o menos sé gestionarme mis entrenamientos en el gimnasio. Tampoco es que me vuelva loco con los aparatos pero sí que me gusta darle a las pesas de vez en cuando», reconoce el castellonense. Sobre todo cuando se le pregunta sobre su enorme pegada, algo que ha llamado la atención en Estados Unidos, donde reside. «Es curioso, porque me hice un estudio de mi 'swing' y, aunque tengo las piernas muy fuertes y son imprescindibles para la estabilidad, no las utilizo para generar potencia. Soy más de hacerlo con mi parte superior. O sea, que si me pusiera podría ir todavía más largo» bromea con una sonrisa.
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Esta filosofía de trabajo la lleva desarrollando desde pequeño, pues en los equipos nacionales se la inculcan entrenadores como Kiko Luna. «Trabajamos muchísimo con los preparadores físicos Paco Fernández y Francis Iguacel, porque al final son posturas básicas que afectan al 'swing' de golf. Todo lo que son abdominales y glúteos son la base de la estabilidad y de ahí sale un movimiento más correcto y también más potencia. Todos losprofesionales están muy fuertes de glúteos y de abdominales, que son la base del 'swing', donde radica la estabilidad y la fuerza». Para el técnico madrileño, no es casualidad que de las últimas hornadas de jugadores que han salido de la Escuela Blume «los que mandan la bola más lejos son precisamente los que tienen unos glúteos y un tren inferior más desarrollados, como Ballester, Jon Rahm o Mario Galiano».
Quienes tienen que bregar con los músculos de los golfistas a diario son los fisioterapeutas del tour, en especial Álvaro Zerolo, que es todo un experto en su cuidado. «Nosotros somos muy aficionados a la potenciación del glúteo, de hecho lo llamamos el rey del cuerpo. Hay que tener en cuenta que es el grupo muscular más grande y con mayor número de fibras, por lo que es un reto tratarlo para que esté siempre a punto y bien activado», concluye.
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