Comprender lo ocurrido: «Niños y adolescentes deben asimilar que el volcán ha cambiado sus vidas»

Para intentar aportar un granito de arena en esta catástrofe, Educ-at entidad psicoeducativa especializada en el trabajo con menores con dificultades y familias, ha creado un soporte online a través del cual ayudar de manera desinteresada a este duro proceso de adaptación.

Y es que, a nivel emocional será muy complicado y requerirá tiempo y esfuerzo el que unos menores cuya personalidad aún no está desarrollada comprendan lo ocurrido . Todo niño necesita comprender que la vida es justa y que el esfuerzo siempre tiene recompensa (cuando nos vamos haciendo mayores nos damos cuenta de que no siempre es así).

Por lo tanto, ¿Cómo asumir de repente que tienen que cambiar de entorno y de vida? ¿Cómo aceptar que todo lo que sus padres han conseguido con mucho esfuerzo se pierde de la noche a la mañana? Sin duda será muy complicado y requerirá de mucha atención psicológica.

Por otro lado, hay otras cuestiones a nivel social que supondrán un gran desgaste. En la mayoría de ocasiones, dichos menores serán reubicados en otros centros a los que se tendrán que incorporar como mínimo en octubre teniendo que «hacer nuevos amigos» con la ansiedad que esto supone en función de las edades o de algunos perfiles.

A su vez, tendrán que intentar en tiempo récord (ya sabemos por desgracia que a veces el ritmo del sistema educativo «no espera a nadie») asumir las pautas educativas, recuperar la base pérdida y tratar de que el impacto en su desarrollo académico sea el menor posible.

No obstante, como siempre ocurre, aquellos alumnos que tengan dificultades serán lo más perjudicados. Para intentar mitigar esto desde Educ-at hemos creado un grupo de soporte online (basta con tener un móvil o una tablet) donde se trabajará a nivel psicoeducativo en grupos ayudando a asumir el impacto emocional , dando herramientas de trabajo y estableciendo pautas para una correcta adaptación a nivel social.

También tendremos una Escuela de familias para facilitar pautas de para la adaptación de los menores y del conjunto familiar a la difícil nueva situación. Y es que es precisamente en estos momentos donde mayores dosis de humanidad debemos aportar.