Yves Bonnefont, consejero delegado de DS Automobiles: «Nacimos con la premisa de que el futuro será eléctrico»

—Tras cinco años de existencia de la marca, ¿DS está donde esperaba?

—Anunciamos la creación de la marca a mediados de 2014. Desde ese momento nos pusimos a trabajar en poner en el mercado un vehículo que fuera 100% original DS. Hemos tardado ente tres y cuatro años en conseguirlo con el DS7 Crossback, que llegaba a los concesionarios en 2018. Además, el vehículo llegaba acompañado de la implantación del servicio «Only you», que es una oferta al cliente para facilitarle todo lo relacionado con su coche. Podemos decir que realmente 2018 es el año cero de la marca, el año en el que realmente todo estaba preparado para competir en el mercado. Y los resultados han sido muy buenos, en 2018 logramos vender 53.265 vehículos, un 0,8% más que el año anterior. Un crecimiento al que ha contribuido de una forma importante España, que ha tenido una mejora en las ventas de un 17,7%, que es un magnifico dato. Con el lanzamiento del DS3 Crossback este 2019 esperamos una aceleración de nuestra actividad comercial. Estos buenos resultados en las ventas se han traducido en unos buenos resultados financieros en el ejercicio pasado.

— ¿Qué espera del mercado español este año?

—Queremos seguir creciendo de una forma fuerte y continuada. Confió en mantener el crecimiento gracias a la apertura de nuevos puntos de venta que complete la importante red de concesionarios que ya tenemos, pero sobre todo confió en el impulso que nos dará la incorporación del DS3 y de las nuevas motorizaciones en el DS7 Crossback, que creo que darán respuesta a la demanda del cliente español. La estructura en España está muy bien preparada para repetir un buen año.

—La presión que están sufriendo los vehículos con motor de combustión, ¿cree que le puede afectar al conjunto del mercado?

—Tenemos la suerte de haber creado la marca en el momento en el que se están produciendo todos estos cambios. Nacimos pensando no sólo en motores diésel o gasolina, nosotros contemplábamos la electrificación dentro de nuestra planificación de futuro. De hecho nuestras fábricas son capaces de producir también vehículos híbridos o eléctricos. Por eso nosotros estamos perfectamente preparados para la electrificación. Somos conscientes que este fenómeno es imparable. Cuando pruebas un coche eléctrico ya no quieres volver a uno térmico. Es como cuando pasas del cambio manual al cambio automático, no quieres volver atrás. En cuanto se den respuestas a las necesidades de autonomía y recarga rápida, la implantación del coche eléctrico será imparable. La circulación en el centro de las grandes ciudades va a ir hacia la electrificación. Pienso que al cliente no le importará invertir más dinero si con el vehículo consigue una repuesta a sus necesidades de desplazamiento. Todas las grandes ciudades están yendo en esa dirección. Este proceso hacia el objetivo de cero emisiones que se vive en las grandes ciudades será una realidad en el plazo de entre cuatro y seis años, lo que nos llevará a un paso de gigante de la electrificación. Lo que sí sabemos es que queremos ser flexibles y tenemos que ajustar la oferta de vehículos en función de lo que demanda el mercado.

— ¿Este momento de cambio es una oportunidad para DS?

—Exactamente. Seguramente es una oportunidad porque estamos construyendo la marca directamente sobre esta premisa de la electrificación, pero también pensando en el vehículo autónomo. De hecho nuestros coches están saliendo ya con un nivel 2 de conducción autónoma.

—Tienen previstos seis lanzamientos en los próximos años. En 2019 llega el DS3 Crossback, ¿qué modelo llega detrás, en qué segmento?

—Es la única pregunta que no puedo contestar. Habrá SUV y coches de todos los segmentos. La oferta es lanzar un coche por año hasta 2025. Este año toca el DS3 Crossback.

— ¿Cómo valorarías el comportamiento del mercado español en 2018?

—Estamos muy contentos con España. El equipo está trabajando muy bien bajo la dirección de Borja Seculis. Creo que hemos hecho el trabajo de sentar las bases de la marca y ahora que tenemos una base sólida tenemos que acelerar.

—En el mercado alemán estáis compitiendo con marcas premium muy consolidadas, como Audi, BMW o Mercedes, ¿cómo ha sido vuestra penetración en ese país?

—Es un gran reto. Pero nuestro posicionamiento es diferente. Si tratamos de ganar a los alemanes con sus mismas armas, tenemos pocas posibilidades de lograrlo. Tenemos claro que hay que ofrecer algo distinto. Ellos llevan un siglo de existencia, son marcas muy sólidas, con una implantación muy fuerte. Nosotros queremos adentrarnos en un territorio diferente, que es ofrecer refinamiento y tecnología. Los alemanes se basan en el poder mecánico. Si fuéramos a competir solo en el apartado de mecánica estaríamos por detrás. Pero el principal atributo de nuestros productos es, ante todo, el refinamiento, la calidad de los materiales, el diseño del interior, con especial atención a los pequeños detalles en los acabados. Además utilizamos la tecnología en una forma en la que los alemanes no lo hacen, que es hacerlo para mejorar el diseño. Un ejemplo de esto son las luces giratorias LED en forma de diamante del DS7 Crossback, que es algo único en la industria de la automoción. Esto habla de nuestra creatividad y nuestra exclusividad, que es un poco la firma de DS que le dota de un especial atractivo a nuestros vehículos.

— ¿Para cuándo está previsto implantar la marca en EEUU?

—La estrategia del grupo en EEUU es implantar servicios de movilidad. En Washington hemos abierto un servicio de movilidad y estamos estudiando abrirlos en otras ciudades. Cuando veamos la respuesta del cliente estadounidense veremos si es interesante empezar a comercializar nuestros coches allí.

— ¿Está previsto fabricar vehículos DS en España?

—De momento no se ha pensado, pero en España el grupo PSA tiene una base industrial muy fuerte, con un excelente nivel de calidad, que están arrojando muy buenos resultados, así que todo es posible. Pero en este momento no está contemplado.