Volvo S60, alto grado de sofisticación

En la zaga, el S60 exhibe nuevos escapes enrasados y defensas actualizadas. Hay nuevos juegos de llantas (incluso de 18 y 19 pulgadas), nuevas tonalidades de carrocería... También el interior se pone al día con revestimientos más suntuosos y un nuevo asiento opcional de mayor sujeción.

Con todo, el apartado técnico es el que puede sorprender más. Y es que la instrumentación es ahora digital , sobre un display TFT que, como ya sucede en el V40, varía de tonalidad según el modo y la configuración seleccionados. El S60 también estrena el llamado Sensus Connected Touch , un avanzado equipo multimedia que permite conectar a Internet, escuchar música online, descargar apps, oficiar de centro wifi; cambio automático de alumbrado de cruce y carretera (actúa sobre cada faro de manera independiente para primar el haz más largo posible); parabrisas calefactado; retrovisores externos fotocromáticos...

Y junto a todo ello, otros como el aviso por cambio de carril no deseado, de obstáculos en los ángulos muertos (ahora por rádar), frenada automática en ciudad hasta 50 km/h, detector de tráfico en sentido perpendicular Cross Traffic Alert (muy práctico al recular el S60 desde aparcamientos en batería)...

La oferta de motores no recibe cambios, de modo que hay S60 de gasolina T3 (150 CV), 1.6 GTDi T4 (180 CV), T5 (251 CV) y T6 (304 CV), y S60 turbodiésel D2 (115 CV) y D3 (136 CV). Del V60 hay además un híbrido enchufable V60 Plug-In Hybrid que recarga en tomas domésticas convencionales y que combina un propulsor turbodiésel de 5 cilindros y 2,4 litros (215 CV) con otro eléctrico (68 CV), el primero para mover las ruedas delanteras y el segundo las traseras (en la práctica actúa como un tracción total, siempre que ambos motores funciones de manera simultánea).