Un joven arranca la oreja a mordiscos a otro por una chica en Vallecas

Los hechos ocurrieron en torno a las 5.15 horas, en la calle de Peña de la Atalaya, a la altura del número 84, indicaron a ABC fuentes de la investigación. Una patrulla de la Policía Municipal fue comisionada en ese punto porque, según el aviso, se estaba produciendo una reyerta a botellazos entre varios individuos. Cuando los funcionarios llegaron al lugar, se encontraron con una mujer de 32 años, la dominicana Carmen D. L. P. G. «Me han pegado y los agresores han huido calle arriba», indicó a los agentes. Algunos vecinos de la zona, que habían presenciado los hechos, corroboraron la versión de la mujer.

Uno de los dos policías corrió en la dirección referida, y a la altura del número 112 de la misma calle interceptó a Ricardo Alfonso M. R. también dominicano y de 21 años. Es también vecino de Vallecas. El chaval explicó al municipal que otro chico le había agredido y que había salido corriendo hacia la estación de Renfe .

En entonces cuando el policía se percató de que al chico le faltaba un trozo de la oreja izquierda. Literalmente. Por ello, dio aviso al Samur. El agente interrogó al herido acerca de la identidad del presunto agresor:«Sí, le conozco, es un tal Gregory Herrera Pérez, pero se le conoce con el mote de ‘Kelvin’. Se ha marchado hacia la estación de trenes», insistió.

Se comunicaron por emisora las características del sospechoso, entre ellas un detalle importante: va sin camiseta, con el torso descubierto. Otra patrulla de municipales dio con él en la calle de Peña de la Atalaya, muy cerca de la estación. Efectivamente, iba semidesnudo y con la cara ensangrentada.

Le dieron el alto y él mismo confesó: «He tenido una pelea y le he dado un mordisco a un hombre, le he arrancado la oreja y me he ido corriendo», vino a manifestar. Los policías le preguntaron:«¿Sabes dónde está el trozo de oreja que le falta al chico?». «Sí, está pocos metros de donde nos hemos peleado», contestó.

Y así fue. Hallaron una buena parte de ella y se la dieron a los médicos del Samur. La víctima había sido trasladada, como también lo fue el detenido, al Hospital Gregorio Marañón. Todo se originó, según los investigadores, por una chica.