Metro de Madrid pide 5 años de cárcel para la cabecilla del «clan de las bosnias»

Según una nota facilitada por la empresa, el juez de Instrucción acaba de finalizar la investigación judicial del caso, por lo que es ahora cuando Metro, personado como acusación particular, realiza el escrito de acusación con las correspondientes peticiones de condena que ahora deberán ser tenidas en cuenta, junto con las que haga la Fiscalía, por el Juzgado de lo Penal que lleve finalmente el juicio que tendrá lugar próximamente.

Las peticiones de condena realizadas por Metro se basan en las investigaciones que la Brigada Móvil de Transporte , de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, ha realizado en los últimos meses. En estas investigaciones se ha averiguado que las seis acusadas forman parte de una banda organizada criminal caracterizada por la unión de sus miembros, con una estructura de mando bien definida y con un rol determinado para cada uno de sus integrantes, repartiéndose siempre de la misma manera los papeles a desempeñar.

Según la citada nota de Metro, las acusadas realizan las sustracciones en el interior de los convoyes, donde aprovechan la concurrencia de muchos viajeros; en la entrada y salida de los coches, donde las denunciadas forman un tapón para impedir el acceso de las víctimas creando confusión; o en el interior de los ascensores, donde suelen acorralar a sus víctimas, así como en las escaleras mecánicas.

La líder marca las pautas a seguir y es quien distribuye los papeles entre el resto de la organización. El resto de las acusadas, salvo una de ellas, se encarga de distraer a las víctimas, mientras que la líder, valiéndose un mapa de metro, chaquetón o periódico, les sustrae lo que lleven encima. Entre tanto, las que distraen a las víctimas también se ocupan de vigilar para alertar de la posible presencia de vigilantes o agentes de policía.

Tras la sustracción, continúan con su maniobra de crear confusión entre los viajeros, aparentando ser víctimas de la misma sustracción. Por último, una última acusada que no ha participado ni en la distracción ni en la sustracción, es la que suele abandonar el lugar de los hechos con los bienes sustraídos, asumiendo el papel de «pasadora», aunque, en ocasiones, también se ocupa de la sustracción de los bienes.