El amargo destino de los protagonistas del último anuncio de Lotería de Navidad

Los dos amigos tienen esta conversación en un bonito jardín de un lugar desconocido que no se descubre hasta la mitad del cortometraje que Tuti Fernández ha escrito y dirigido. En todo momento el único que habla es el camarero. Están esperando a la esposa del hombre que se quedó sin comprar el décimo el año pasado . «A ver con qué cara la miras ahora», le reprocha.

Sin embargo hay algo que no cuadra: falta un protagonista. Él, el que fuera el hombre más famoso durante las Navidades de 2014 , el del rostro descompuesto cuando le cobran 21 euros por un café , no está. Bueno, está pero de una forma diferente: muerto. Sus cenizas están ahí: « se ha tirado cuatro o cinco días ardiendo , si no te lo hubiera traído antes». A quien se lo dice es a la mujer de Manu, que tampoco está en su mejor momento puesto que pasa sus días bajo cuidados médicos por sus problemas psicológicos. «Pero cómo ha sido», pregunta ella. «Pues no sé muy bien: había una enana, una cabra, dos malabaristas, cinco o seis 'travelos', un señor de Salamanca ; pero no me acuerdo muy bien». «La culpa es mía. No tendría que haberle dicho que bajara al bar».

«Hemos hecho un montón de cosas. En cuanto me acuerde de alguna te la cuento. De todas formas él te quería mucho… Se olvidó de ti, te dejó en la calle, se gastó todo el dinero …», trata de convencer a la ya viuda de Manu el que fuera su amigo de fiestas. Este «antianuncio» de Navidad termina con un mensaje dispar: « Recuerda: si te toca este año no desparrames ».