Silencio sobre las 1.500 denuncias contra Hamás por violación

«Vi cómo el terrorista la inclinaba, la violaba y simplemente la pasaba al siguiente. Estaba viva cuando la violaron. Estaba de pie y sangraba por la espalda. Le tiró del pelo. Le disparó en la cabeza mientras la violaba, ni siquiera se levantó los pantalones. Le cortaron el pecho y jugaron con él», dice un testigo que presenció una de tantas violaciones, recogido por las FDI.

Las evidencias parecen que son claras y existe material fotográfico que lo corrobora. Los primeros indicios de violencia sexual llegaron ya el 7 de octubre, con las propias grabaciones en vídeo de los militantes de Hamás. Pero las investigaciones posteriores ratifican estos hechos.

Los civiles israelíes fueron torturados, violados y abusadospor combatientes de Hamás, según las pruebas reunidas por estos equipos forenses. Shari Mandes, miembro del Ejército israelí y que está como voluntaria en la morgue de Shura, las ha visto en primera persona: «Hemos visto a mujeres que han sido violadas. Niños y hasta ancianas que han sido violadas».

Pero, y como denuncian las organizaciones israelíes, estas víctimas no están siendo tomadas como tal, ni en ninguna organización ni tampoco ningún organismo público defensores de los derechos de la mujer. Por eso ayer, decenas de personas –en su mayoría mujeres– se manifestaron en Madrid enfrente del Ministerio de Igualdad para denunciar el silencio que este, y otros organismos, mantienen sobre estos hechos. «Se ha demostrado que Hamás violó a estas chicas. Muchas de ellas estaban en el festival de música celebrando y bailando, pero nadie está alzando la voz sobre estas atrocidades, por eso estamos aquí. No puede ser que nadie denuncie estos actos», explicó la portavoz de la comunidad judía en España Carolina Aisen.

«Queremos que España, y sobre todo el Ministerio de Igualdad apoye a las mujeres israelíes. En otras situaciones ya han manifestado su apoyo contundente a las víctimas, pero esta vez no ha sido así», explica la presidenta de la comunidad judía, Estrella Bengio. «Violación es violencia» se podía leer en las pancartas que mostraron enfrente del Ministerio, para denunciar el silencio de este.

Antes, el lunes una delegación de israelí celebró una reunión a puerta cerrada en la sede de las Naciones Unidas en Ginebra para «crear conciencia sobre la violencia sexual contra las mujeres» perpetrada durante los ataques de Hamás, en medio de críticas de que el organismo mundial ha guardado silencio sobre el tema. Durante la reunión, acusaron a los organismos de derechos humanos de la ONU de «minimizar» la violencia sexual contra las mujeres.

La Policía de Israel ha reconocido que la investigación sobre estos hechos va a llevar meses de trabajo y que la cifra de 1.500 denuncias podrían ser muchas más.