El español acusado de espía Pablo González, alias Pável Rubtsov, entre los presos canjeados por Rusia

Pável Rubtsov, que fue su primer nombre, nació en Moscú en 1982 y vivió en la Unión Soviética hasta los nueve años. Apenas cayó el Muro de Berlín y fueron posibles los viajes fuera de Rusia, su madre de origen español se divorció de su padre ruso y se trasladó al País Vasco, donde cambió el nombre del niño por el de Pablo González Yagüe en el Registro Civil. Pável mantuvo sin embargo tanto contacto como pudo con su padre, al que intentaba agradar a distancia leyendo en ruso, para no olvidar la lengua. Más tarde se licenció en Filología Eslava y estudió también un máster en Estudios Estratégicos y Seguridad Internacional.

Gracias a su formación y a su facilidad para obtener visados de entrada y moverse por los países de la antigua Unión Soviética, comenzó a realizar trabajos periodísticos para medios españoles como La Sexta, 'Público' o 'Gara', hasta que el 27 de febrero de 2022 los guardias fronterizos polacos de Przemysl observaron un comportamiento sospechoso del acreditado como periodista español. Sus tareas de reportero incluían tomar nota muy detallada de las identidades y direcciones de ciudadanos polacos que acogían y ayudaban a los refugiados ucranianos que, a toda prisa, huían con lo puesto de la guerra. Hacía preguntas pormenorizadas sobre qué refugiados eran albergados por qué personas y mantenía comunicaciones con números de teléfono rusos. Así fue expuesto posteriormente en el juicio en el que fue condenado por el delito de espionaje.

Durante los trabajos de comprobación que efectuaron los servicios de Inteligencia polacos, surgieron otras pruebas que apuntaban a su relación con los servicios secretos rusos. Los datos de la plataforma rusa Sirena-Travel, que gestiona las reservas de billetes de avión y que fueron publicados por el grupo de investigación independiente 'Agientstwo', probaron que había seguido utilizando documentos bajo el nombre de Pável Rubtsov y que había viajado en avión en compañía del agente del GRU Serguéi Turbin. Rubtsov y Turbin volaron juntos el 16 de junio de 2017 de Moscú a San Petersburgo y la posibilidad de que hubiese sido una mera coincidencia quedó rápidamente descartada por el hecho de que ambos billetes fueron adquiridos al mismo tiempo y por la misma cuenta.

La Inteligencia polaca obtuvo después documentación adicional que confirmaba que tanto Turbin como sus familiares directos mencionaban regularmente en sus conversaciones la dirección del número 50 de la calle Narodnoje Opolchenije como su lugar de residencia, también en los formularios de registro, la misma dirección en la que Turbin recibía correspondencia oficial y multas de tráfico. La dirección corresponde a instalaciones de la Academia Militar del Ministerio de Defensa ruso, más conocida como el 'conservatorio GRU', donde se lleva a cabo la formación de oficiales de Inteligencia militar. Otros agentes del GRU han proporcionado anteriormente esta dirección postal para evitar dejar rastro de la suya propia, como Denis Serguéyev, uno de los participantes en la operación para envenenar al exagente ruso Serguéi Skripal en Salisbury en 2018.

La Inteligencia polaca considera probado que González-Rubtsov había cumplido anteriormente otras misiones para los servicios secretos rusos. Durante años fue miembro del círculo íntimo de Zhanna Nemtsova, hija del opositor ruso Boris Nemtsov, asesinado en Rusia en 2015. La conoció en 2016 en Bruselas, obtuvo una gran presencia en su día a día y habría estado informando sobre sus actividades y la fundación que había creado. Escribió numerosos informes sobre ella, sus amigos y sus asociados, a los que han tenido acceso los servicios polacos.

También pasó mucho tiempo en Ucrania antes de acudir a la frontera polaca, al inicio de la guerra. Informó para medios extranjeros sobre la anexión de Crimea y la guerra en Donbass hasta que el Servicio de Seguridad de Ucrania le exigió que abandonara el país debido a las sospechas de que su trabajo se extralimitaba de la actividad periodística.

En el momento de su detención, González llevaba encima dos pasaportes con sus dos identidades, que la Agencia de Seguridad Interna presentó como prueba de identidad falsa con fines de espionaje. Además de español, habla inglés, ruso y polaco. Incluso cuando trabajaba para medios relativamente pequeños desplegó una intensa agenda de viajes para cubrir actos de interés relativo, como una conferencia de prensa sobre el derribo de un MH17 en octubre de 2019 o la ceremonia de entrega de los premios Boris Nemtsov en Bonn, en la que recabó gran cantidad de información sobre los disidentes rusos refugiados en Alemania.