La presidenta de Perú llama a la calma para evitar una trágica fractura del país

El gabinete de la primera mujer en presidir el Perú es paritario. Además de la presencia del exfiscal Pedro Angulo destacan Hania Pérez de Cuéllar –nieta del fallecido exsecretario general de Naciones Unidas, Javier Pérez de Cuéllar– como ministra de Vivienda; la cartera de Medio Ambiente recae en Albina Ruiz; la de Exteriores, en Ana Cecilia Gerbasi, y la de Educación, en Patricia Correa.

ABC estuvo presente en la sala Elespuru del Palacio de Gobierno, donde se tomó el juramento a los nuevos ministros y en el que se vivió un ambiente de mucha alegría entre los familiares. Se dieron cita los corresponsales de prensa extranjera de muchas partes del mundo, que han llegado para conocer de primera mano lo que pasa en un país donde la inestabilidad política es moneda corriente.

El pasado miércoles, el expresidente Pedro Castillo decidió disolver el Congreso y tomar todos los poderes agobiado por las denuncias de corrupción en su contra y a pocas horas de que se votara la tercera moción de censura en su contra ante un Parlamento hostil desde que llegó al poder.

Tras el fallido autogolpe, se informó de que Castillo había recibido una oferta de asilo por parte del Gobierno de México. Cuando se dirigía a la embajada de México, sus escoltas lo condujeron a la Prefectura de Lima, donde lo detuvieron por el delito de rebelión.

Mientras se esperaba la juramentación del gabinete ministerial, el ex primer ministro, Aníbal Torres, de 79 años, hizo un anuncio dramático: decidió pasar a la clandestinidad tras no asistir a la citación de la fiscal de la nación, Patricia Benavides, que lo ha denunciado por el presunto delito de rebelión.

«La fiscal sin razón me ha denunciado por formar parte de una organización criminal y por perturbación a la justicia. Ahora lo hace por rebelión y otros delitos, solo por oír el mensaje presidencial. Dice que los fiscales son operadores políticos. Ante esto paso a la clandestinidad», dijo Aníbal Torres en su cuenta de Twitter.

Entretanto, la ex primera ministra, Betssy Chávez, no acudió a la citación de la Fiscalía, pero sí fue a visitar a Castillo a la cárcel de Barbadillo, en las afueras de Lima, donde está también encerrado desde el 2007 el expresidente Alberto Fujimori. Según pudo saber ABC, Chávez es la ideóloga del discurso donde Castillo disolvió el Congreso junto al ex primer ministro Anibal Torres y el exministro de Defensa, Gustavo Bobbio. En una entrevista, Chávez negó estas acusaciones, a pesar de que han salido a la luz conversaciones de WhatsApp donde convocó a los ministros diciendo: «Hoy es un día histórico».

Desde que Pedro Castillo pasó de expresidente a reo por el delito de rebelión, se han convocado marchas en Lima y a nivel nacional pidiendo «que se vayan todos» y que se adelante la convocatoria de elecciones generales para elegir nuevo mandatario y renovar en su integridad el Congreso, formado por 130 parlamentarios.

En conversación con ABC, los estudiantes universitarios Anali Salas y Mauro Chávez, que estaban en la plaza San Martín manifestándose, señalaron que «la razón por la que salimos no es por la salida de Castillo. La población lo que quiere son cambios. La presidenta Dina Boluarte no supone un cambio, sino una continuidad».

Analí, de 21 años, añadió: «Me parece injusto que el Congreso siga ahí, no nos representa. Castillo ha cometido actos de corrupción y me siento indignada por que ese Congreso corrupto celebre la salida de Castillo. Por eso estoy marchando». Otro manifestante señaló que la presidenta Dina Boluarte «no nos representa. El país está en manos de los poderosos de siempre».

Sobre la represión en las protestas, la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos indicó que se respeten los derechos de los manifestantes porque han documentado «una serie de prácticas policiales que vulneran derechos fundamentales y que podrían ser el primer paso en una represión de grandes magnitudes como la que se vivió en noviembre del 2020».