Michael Cohen, de aliado acérrimo a detonante de la imputación de Donald Trump
El antiguo abogado y portavoz del expresidente era el encargado de solucionar sus problemas durante 12 años. Ahora es uno de los testigos clave en el caso que podría llevarlo a la cárcel
Trump, ante la justicia: las claves del primer caso de un expresidente imputado en la historia de EE.UU.
Javier Palomo
Madrid
En 2017 aseguraba que se hubiera interpuesto entre su jefe y una bala. Tal era la lealtad de Michael Cohen por el exmandatario, para quien trabajaba desde 2006. Durante 12 años fue el hombre de máxima confianza de Donald Trump. Ahora, quien era ... su más fiel aliado es su peor enemigo. Se trata de la pieza clave del proceso judicial que el fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, está tratando de llevar adelante contra Trump.
Cohen (Nueva York, 1966) admitió en 2018 ante el juez que rompió varias veces la ley para proteger a su cliente. Seguramente lo hizo en muchas otras ocasiones cuando Trump era sólo empresario, pero a la Fiscalía lo que le interesa son las veces en que mintió y cometió fraude para proteger al exmandatario cuando este ya aspiraba a ser presidente de la primera potencia mundial.
Bragg ha estado investigando la participación de Trump en un pago de 130.000 dólares realizado en 2016 a la actriz porno Stormy Daniels, para evitar que se hiciera público un encuentro sexual que aseguró haber tenido con él años antes. El efecto sorpresa por las nuevas revelaciones del caso ha llevado al Gran Jurado a acelerar la entrega de Trump, que deberá comparecer el martes por los delitos que se le imputan.
Donald Trump, imputado por pagar a una actriz porno para comprar su silencio
Javier AnsorenaEs el primer expresidente de Estados Unidos que afronta cargos criminales
Ahora, está comprobado que Cohen desembolsó los 130.000 dólares a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels y otros 150.000 dólares a la modelo Karen McDougal con el fin de que mantuvieran en secreto sus respectivas relaciones con Trump, quien ya estaba casado con su actual esposa, Melania. Cohen realizó los pagos a través de una empresa ficticia. Esto antes de que el republicano hiciera un reembolso a través de la empresa The Trump Organization, que registró los movimientos como gastos legales.
Inicialmente, el abogado dijo que había actuado por su cuenta, pero bajo juramento terminó declarando que Trump le encargó personalmente que entregase el pago a Daniels y le devolvió una cantidad equivalente. Fue sentenciado en 2018 a tres años de prisión tras admitir los pagos ilegales, cometer fraude impositivo y mentir en primera instancia al Congreso. Sin embargo, fue liberado bajo arresto domiciliario a mitad de su condenada, debido al coronavirus.
'Fanático' de Trump
Cohen fue candidato al Consejo Municipal de Nueva York en 2003 y un gran admirador de la personalidad pública de Trump antes de trabajar para él. De hecho, consiguió un puesto en el edificio Trump tras impresionar al magnate, al defenderlo en una reunión de la junta de condominios en 2006, según indica 'The New York Times'.
Rápidamente se hizo con el papel de anticipar los caprichos y deseos de Trump e interpretar sus instrucciones, las que más tarde el abogado describiría como «códigos». Cuando uno de los amigos de Trump le preguntó por qué mantuvo a Cohen cerca, el exmandatario respondió: «Él tiene su propósito», explicó a 'The New York Times'. Ese propósito, dijo Cohen más tarde, incluía limpiar algunos de los líos de Trump.
Tras su liberación, Cohen dejó de ser aquel hombre que una vez intimidó y señaló a cualquiera que fuera crítico con Trump. En 2020 publicó «Desleal, unas memorias» (Skyhorse Publishing), donde acusaba al republicano de ser «un tramposo, un mentiroso, un fraude, un matón, un racista, un depredador y un estafador». Desde entonces, el abogado se ha encargado de destruir la imagen que anteriormente difundía de Trump. En el libro, indicaba que Trump llegó a decir que «los negros son demasiado estúpidos como para votar por Trump» o que no hay «un país dirigido por una persona negra que no sea un mierda». La Casa Blanca negó todas esas afirmaciones, y acusó a Cohen de ser un delincuente que actúa solo movido por ansias de venganza.
Recientemente, el 14 de marzo, Cohen se negó a discutir el caso actual contra Trump en una entrevista con 'USA Today', diciendo que no tenía mala intención hacia el expresidente y que solo quería que el Gran Jurado escuchara los hechos del caso.
Cuando los periodistas le preguntaron el 20 de marzo fuera del juzgado si quería que arrestaran a su exjefe, Cohen respondió que su objetivo era decir la verdad y ayudar en la investigación. «Esto no es venganza, ¿verdad?», dijo. «Se trata de responsabilidad. Necesita rendir cuentas por sus actos sucios».
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete