Mauricio Claver-Carone, expresidente del BID: «Me amenazó y extorsionó el presidente de Argentina»
Entrevista
Claver-Carone acaba de ser destituido por la junta de gobernadores después de que un correo anónimo le acusara de tener una relación inapropiada con su jefa de gabinete
Investigan al presidente del BID, Mauricio Claver-Carone, por una supuesta relación con una asistente
Mauricio Claver-Carone, expresidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID)
El mayor banco de inversiones de América Latina está en un insólito estado de conmoción. El Banco Interamericano de Desarrollo, una institución de gran raigambre en Washington, acaba de destituir a su presidente tras solo dos años de mandato. Mauricio Claver-Carone entró a ... dirigir el BID con polémica, pues fue la primera persona no nacida en América Latina en ocupar el cargo. Y se despide igualmente con polémica, al ser destituido por la junta de gobernadores después de que un correo anónimo le acusara de tener una relación inapropiada con su jefa de gabinete, que él trajo al banco como parte de su nuevo equipo, y aumentarle después el salario. En una entrevista con ABC, este abogado de 47 años, que asesoró a Donald Trump en la Casa Blanca sobre política latinoamericana, niega las acusaciones, y denuncia amenazas y presiones de Argentina, México, Colombia, China y otros. El banco que ha presidido, del que España es miembro y que en 2021 concedió inversiones y préstamos de 23.300 millones de dólares, busca ahora un sustituto. De momento, Claver-Carone asegura que se reserva la posibilidad de emprender acciones legales por cómo se ha llevado a cabo este proceso.
— ¿Se le ha notificado el motivo de su destitución?
— Han pasado seis meses desde que comenzó todo este proceso y todavía nadie de la oficina legal del banco ha hablado conmigo. Nadie me ha presentado formalmente la carta anónima, las alegaciones, la acusación. Absolutamente nadie ha hablado conmigo durante este proceso.
—Lo que se ha filtrado desde el banco, y lo que dijo el Tesoro de EE.UU. es que usted se negó a cooperar plenamente en la investigación...
— Todo lo contrario. No se me puede acusar de no cooperar cuando ni el primer día se sentó nadie conmigo a decir qué se esperaba de mí. No me dijeron cuáles eran las reglas, qué esperaban de mí. Me pidieron el teléfono, y yo tengo en mi teléfono textos, llamadas, intercambios con presidentes, ministros y otras personas las cuales confían en que no voy a revelar sus conversaciones, que son confidenciales. Pero le di el teléfono a una firma tecnológica independiente. Me costó a mí dinero de mi bolsillo, bastante, y ellos sacaron todos los textos relevantes a esta investigación y además confirmaron que no borré ninguno.
— En el comunicado en que se anuncia que la junta de gobernadores le ha destituido no se detalla tampoco una razón. Sí se filtró el informe, en Colombia, y se mencionaba una relación sentimental de usted con su jefa de gabinete. Es lo que decía el correo electrónico anónimo del 29 de marzo que precipitó una investigación.
— A mí se me tendría que haber informado. ¿De qué se me acusa bajo las reglas del banco? Se me tiene que dar debido proceso. Violaron varias reglas del banco en mi contra, no me dejaron responder, no me informaron de los cargos y ni me han avisado ni me avisaron de qué regla se suponía que yo violé. Y hoy en día, al terminar todo este proceso, todavía no dicen por qué. Su informe muestra que no violé ninguna regla del banco.
— ¿No hay en el banco normas contra relaciones entre empleados?
— Yo he visto las reglas del banco el primer día y soy abogado. La ley dice: si tienes una relación existente, la tienes que reportar. Y eso pasa muchísimo.
— ¿Y la reportó?
— Yo no he estado en una relación. Y la investigación dice que no hay ninguna evidencia para apoyar que yo tuve una relación existente. Fue un proceso arbitrario, ad hoc y político. Fueron a mi historia antes de llegar al banco, y entonces hubo una alegación en el divorcio de mi jefa de gabinete en el 2019, en el cual su ex marido la acusa de haber tenido una relación conmigo. Y eso en una corte en Virginia fue desestimado. Termina en que él era un mentiroso. Y sin embargo, eso es lo que usan para justificar que en algún momento hubo una relación, lo cual no solamente no es verdad y fue desestimado en la corte, pero es irrelevante para las reglas del banco hoy en día. Lo que se me hizo un juicio de principios. Y definido por ellos. Pero no de reglas. Fue un juicio de valores y, ellos, desde el primer día decidieron cuáles eran esos valores.
— Pero ¿quiénes son ellos?
— Obviamente los países que desde antes que llegué estaban intentando sacarme, que comenzaron a crear un proceso y presión política para hacer una investigación sin reglas, no transparente y que al fin y al cabo iba a terminar siendo política.
—¿Y que países son?
— Bueno, lo sabemos, Argentina, México, los países del socialismo del siglo XXI, y algunos de los países que estaban enojados de que no quise apoyar las políticas de padrinazgo político que acostumbran el banco. Recordemos que el banco fue una institución que por más de 60 años fue controlada por Argentina, Brasil y México, más del 60% del dinero ha ido a esos países. Yo entré con una mentalidad muy americana de cambiar a la institución a ser más eficiente, más chica. Y entonces eso creó un disgusto entre los países grandes. Y a mí directamente me amenazaron, me quisieron extorsionar.
— ¿Quiénes?
— El presidente de Argentina, el ministro de Finanzas de Brasil, el ministro de Finanzas de entonces de México me me extorsionaron claramente, me decían si tú no pones a esta persona para esta posición, no te apoyamos en nada, te vamos a hacer la vida miserable y eventualmente te vamos a sacar. Esa extorsión, esa amenaza, desde el primer día.
El banco fue una institución que por más de 60 años fue controlada por Argentina, Brasil y México, más del 60% del dinero ha ido a esos países
Mauricio Claver-Carone
Expresidente del BID
— Hablaba del nexo socialista, pero Brasil no entra ahí.
— Con Brasil no era ideológico. Brasil era cuestión de poder. El ministro de Finanzas, Paulo Guedes, quería que colocara a su mejor amigo. Es desafortunado, pero natural. En algunos de estos países, es común ese tipo de extorsión política para los fichajes en estas instituciones. Yo cambié eso y me gané muchos enemigos. Pero no solamente es eso. El banco tiene un fondo que eran 100 millones de dólares al año para asistencia técnica. Y todos estos cargos políticos dentro del banco van y cogen de ese dinero para proyectos de asistencia técnica. Y ahí es como entonces contratan a todos sus amigos de consultores, hacen proyectos para apoyar a los países amigos y se ganan favores con los diferentes países.
— Pero entonces, usted que ha sido presidente del BID, denuncia que hay una corrupción estructural en el BID.
—Organizada, institucionalizada. Tuvimos que salirnos de proyectos en Colombia y Honduras por ello. Sin embargo, me presionaron mucho en el banco para seguir adelante. Y me decían me lo dijo un funcionario del banco, el director de infraestructura en aquel momento, bueno, pero es que hay que trabajar con la corrupción en Latinoamérica. Sin corrupción no se puede.
— Volvamos un momento a las alegaciones que se han filtrado, de un romance con su jefa de gabinete...
— A ver, si yo hubiese violado las reglas, no hubiese habido filtraciones. ¿Por qué tienen que filtrar? Porque tienen que desinformar. Porque tienen que hacer un cuento, una narrativa, a su manera, aunque sea contraria a los hechos. Entonces, ¿qué es lo que hay que hacer? Hay que ir a hacer atacarme. No se puede admitir que he hecho una buena labor, y hay personas en la actual administración americana que me han querido sacar y me han querido fuera.
Porque soy republicano, porque soy americano, de Miami, porque soy de la administración Trump y al fin y al cabo eso siempre, siempre fue un estorbo
— Cree usted que es porque estuvo en el Consejo de Seguridad de la Casa Blanca con Donald Trump.
— Porque soy republicano, porque soy americano, de Miami, porque soy de la administración Trump y al fin y al cabo eso siempre, siempre fue un estorbo.
— ¿Y no le preocupaba esto cuando se planteó su nombre para el puesto que ya hubiera resistencias por el hecho de no ser nacido en América Latina y por venir de la Casa Blanca? Eso se comentó mucho.
— Pero yo fui elegido. Gané con el voto de 23 de los 28 países de la región. Y lo hice con un programa claro. Yo llegué denunciando que China se aprovechó de la mala gestión que hubo en el banco por muchos años. Planteé que si EE.UU. planteaba un método para apoyar a los países americanos, podríamos traer más capital por primera vez al BID. Una de las quejas más grandes que escuché siempre era por qué ya las empresas americanas no estaban invirtiendo y compitiendo en los proyectos en la región. Reforzar la confianza al sector privado. Ese fue el plan. Y ahora, desafortunadamente esta administración nunca entendió ese plan.
— Se refiere a la administración Biden. No tuvo fluidez con ellos.
— No. No importa el trabajo que hayamos hecho, no importa que batimos todos récords en financiamiento, que fuimos la única institución en el mundo que estaba financiando el nearshoring [facilitar que las empresas trasladen sus operaciones externalizadas de Asia a América Latina]. No importa lo que hiciéramos, esta administración no podía quitarse sus prejuicios por ser yo republicano, por venir de la administración Trump.
— En la Casa Blanca tenía usted posiciones duras sobre Cuba y Venezuela, entre otros. ¿No se requería para su cargo cierta neutralidad?
— De nuevo, 23 de los 28 países de la región votaron por mí y yo gané con más votos que el anterior presidente. Y todos los países de la región que votaron por mí sabían que yo era una persona a la que asignar un estereotipo ideológico. Pero hubiera sido una persona práctica y efectiva y que me he sentado a hablar.
— Déjeme volver a preguntarle por lo que llevó a su destitución. ¿Hubo relación o no?
— No hubo una relación, no hay relación. Y en el banco, las reglas dicen claramente que si hay una relación existente tienes que reportarla. Existente de antes o en la actualidad. Y el reporte dice claramente, dice claramente no hay evidencia para sustanciar las alegaciones de que hubo una relación.
— Se filtró también aumentos de sueldo a esta persona con la que se le atribuyó la relación.
— Cuando yo entré al banco, nadie se comunicaba con nosotros sobre los sueldos. Yo pregunté cuánto ganaban los los antecesores, no solamente mi jefa de gabinete, todo el equipo ejecutivo, nunca se me decía . Ya al estar en el banco, a mediados del 2021, por fin pudimos ver que no solamente la jefa de gabinete sino todo el equipo cobraba bastante menos que sus predecesores. Y yo lo que decidí en ese momento es que les aumentaron los sueldos a todos, equipararlos a sus a sus antecesores. Y en el caso de la jefa de gabinete, su antecesor era sumamente menos calificado que ella, pero era hombre. Es sexista, es machista porque yo creo que nadie discutiría que una mujer mejor calificada que un hombre debería ganar lo mismo.
— Lo que cuenta suena casi a una novela, como una conspiración para echarle.
— Es que fue una conspiración. No era una coincidencia que la carta anónima cayera el día después de una asamblea anual que hicimos exitosamente. Y yo creo que ahí fue donde un grupo de personas decidieron que o intentaban atacarme y eliminarme personalmente o iban a perder la oportunidad, particularmente si aquí en noviembre ganan los republicanos en las elecciones.
— Cree que esto no hubiera prosperado con un Capitolio en manos republicanas.
— Sin duda, esta era la última oportunidad que tenían. Yo creo que algunos países grandes han manejado el BID como su propio fondo, como un fondo casi personal para ellos, así que el experimento del presidente de EE.UU. Tenía que fracasar.
— ¿Qué países?
— Argentina, México, Brasil no podían tolerar que culminara con éxito la recapitalización, las reformas, que esta fuera la presidencia del BID más exitosa, bajo un americano. Y además sabían que yo solo me quedaba un mandato de cinco años.
— La verdad no concibo el trabajo de presidente del BID si uno tiene en contra a Argentina y México.
— Al fin no pude aguantar más porque mi propio país, por su falta de visión política y por su prejuicio político en mi contra, no me apoyó. Mientras tanto, estaba yo recibiendo amenazas por escrito del gobierno chino.
—¿Dice que le amenazó el Gobierno chino?
— Cuando hice un cofinanciamiento con Taiwán me mandaron e-mails, mandaba el embajador chino, el Banco Central chino y el representante de China en el Banco me dijo claramente de que ellos se reservaban el derecho a represalias.
— Así, que se reservaban el derecho a represalias.
— Le mando el email. [En un correo compartido con ABC, Jing Chen, de la vicepresidencia de la rama de inversiones del banco, dice que el régimen chino «se reserva el derecho a tomar acciones» por la «politicalización» de las relaciones con Taiwán]. Estaba yo como presidente de un banco en el cual tenía a China en contra. Tenía los tres países grandes que controlaban todas las posiciones y que querían de nuevo controlar toda esta este esquema de posiciones políticas. Y mi propio país me traicionó.
— ¿Se arrepiente de algo, entonces?
— Mira yo sé que soy muy frontal. Yo te digo las cosas como son. O estoy contigo o no estoy contigo. Estoy de acuerdo, o no estoy de acuerdo. Y en el directorio del banco había una actitud siempre muy hipócrita. Te decían una cosa y después terminábamos y te apuñalaban. Nunca frontal, siempre por detrás. Y es todo como un nido de traición. Yo no tengo la menor duda que si me hubiese resignado a tener una relación de amiguismo con el directorio, como han hecho todos mis antecesores, esto no hubiese pasado.
— ¿Se reserva acciones legales?
— Estoy viendo con mis abogados la posibilidad de presentar acciones legales por difamación, por las violaciones de la confidencialidad, por filtrar las cartas y los informes. No lo he descartado.