«La guerra de Ucrania ha descubierto a un nuevo Zelenski, el verdadero»

Rudenko demuestra una gran confianza en las posibilidades de victoria de Ucrania en la guerra, y también en la figura del presidente. «No tengo ninguna relación con Zelenski, nunca la tuve. Mi libro es un trabajo periodístico, un retrato político más que una biografía», afirma el autor. Aunque, a pesar de no ser una biografía en sentido estricto, es una buena herramienta para conocer la carrera política del líder ucraniano. Así, repasa su ascenso al poder y también los claroscuros de su mandato.

Desde antes de su candidatura oficial a la presidencia, en diciembre de 2019, las capacidades de Zelenski como dirigente y gestor estuvieron en entredicho. La opinión pública ucraniana le tachaba de ser un producto propagandístico, de ser un incompetente y de desconocer principios básicos de Economía, Derecho y política, imprescindibles para cualquiera que quiera ostentar un cargo público. Sin embargo, pese a no haber tenido tiempo para estudiar en los últimos meses, según Rudenko, su papel en la guerra de Ucrania ha cambiado esta percepción: «La guerra ha sido el mejor reactivo (para Zelenski). En tiempos de paz nunca hubiéramos visto su coraje y valentía. Antes fue acusado de falta de fuerza y voluntad, tanto por opositores como por periodistas, yo incluido. La guerra nos ha mostrado otro Zelenski, el verdadero».

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Por otra parte, Serhii critica algunas las actuaciones de Zelenski desde su llegada al poder. Tras su victoria en las elecciones presidenciales, en cuya campaña utilizó un discurso marcadamente 'antiestablishment', distintas figuras como el politólogo Serhii Gaidai le acusaron de haberse convertido en una figura más del sistema contra el que decía luchar. Según él, una vez fue consciente del poder que le otorgaba la mayoría absoluta en el Parlamento, empezó a deshacerse de quienes le incomodaban o no eran lo suficientemente leales. Zelenski conformó un Gobierno con tintes nepotistas, incluyendo entre sus filas a amigos y allegados . Ante esta realidad, Rudenko afirma: «La guerra no ocultó este hecho. Me molesta que no accedieran a esos cargos por mérito o experiencia, sino por ser amigos de Zelenski». En cambio, para él, las últimas salidas en su equipo, que afectaron al jefe de los servicios de Inteligencia y a la Fiscal General, están «relacionadas con la guerra».

Concretamente, las personas que, de la mano de Zelenski, accedieron a la política ucraniana eran sus colegas de Studio Kvartal 95, la productora que catapultó al presidente a la esfera mediática. Actor de profesión, interpretó en la serie 'Servidor del pueblo' a un profesor que llegaba a ocupar el cargo de presidente. «La televisión ha dirigido el país durante los últimos tres años. Literal y metafóricamente, pero los acontecimientos que tienen lugar hoy en Ucrania son más terroríficos que cualquier 'reality show'. Cualquier película o libro de terror no es nada comparado con la realidad», afirma Serhii.

A pesar de todo, Serhii Rudenko tiene confianza ciega en la respuesta ucraniana frente a la agresión rusa. Para el futuro, también espera que Zelenski no se vuelva a presentar a las elecciones y quede en la memoria como un héroe de guerra: «Es un personaje histórico y no quisiera que su imagen sea destruida por cuestiones políticas». En cuanto a la resistencia ucraniana, a ojos de Serhii esta permanece unida: «Después de nuestra victoria, veremos a los veteranos de guerra llegar al poder. Es posible que el próximo presidente sea un militar». Sin embargo, se muestra preocupado por la «presencia de agentes rusos en el Gobierno». Fía la lucha contra los espías a los servicios de Inteligencia del país, que ya habrían desbaratado más de diez intentos de asesinato contra el presidente.

Rudenko recuerda la mañana del 24 de febrero en Kiev, «cuando los primeros misiles balísticos cayeron detrás de mi casa». Ahora reside en Lviv, al oeste de Ucrania, donde se trasladó después de que el estudio de televisión de la cadena para la que trabajaba empezase a funcionar como un refugio de guerra. «Lo más difícil fue darme cuenta de que constantemente están tratando de matarte, aunque esto refuerza la fe en nuestra victoria», afirma.