Giorgia Meloni plantea unas elecciones regionales como un plebiscito sobre su gestión
Se vota en Lombardía y Lazio, las dos regiones más importantes del país, en la que se impondrá claramente la derecha, dominada por Hermanos de Italia
La primera ministra italiana asegura que «esta votación dirá exactamente qué es lo que piensa Italia»
Meloni vincula inmigración con inseguridad en su visita a Scholz
Corresponsal en Roma
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónGiorgia Meloni confía en obtener una clara victoria en las importantes elecciones regionales de este domingo y lunes, planteadas por la primera ministra como un plebiscito sobre su gestión. Solo se vota en dos regiones, pero son las más importantes de Italia: Lombardía, ... motor económico del país, con más de 10 millones de habitantes y el 22% del productor interior bruto (PIB), con Milán como capital financiera; y el Lazio, la segunda más poblada, con 5,7 millones de habitantes y 11% del PIB, con Roma como capital político-administrativa.
Las elecciones regionales en Italia siempre han tenido relevancia nacional, porque han servido para confirmar o derribar gobiernos, y destruir o crear liderazgos. No sucederá así en esta ocasión, porque salvo que se equivoquen todas las encuestas, las derechas, con un amplio predominio de Hermanos de Italia, tienen asegurada la victoria, frente al centro izquierda que se presenta completamente fragmentado. El sistema electoral italiano premia a las coaliciones. El cuadro de las profundas y tribales divisiones del centro izquierda, con algunos rencores permanentes, se refleja en que el Movimiento 5 Estrellas, cuyo líder Giuseppe Conte, cuando fue primer ministro se alió en su primer gobierno con la derecha y en el segundo con la izquierda, esta vez en Milán se presenta en coalición con el Partido Democrático y en solitario en Roma.
Referéndum sobre el Gobierno
Las posibilidades de ganar el centro izquierda son ínfimas. Sería una hazaña inesperada. Su única esperanza está ligada a que la participación electoral sea muy baja. En Italia, cada vez menos gente acude a votar, sobre todo cuando, como ahora, se conoce de antemano el resultado. Los electores saben que su voto difícilmente cambiará el pronóstico de una victoria de las derechas en Lombardía y Lazio, independientemente de la calidad de las administraciones y el liderazgo de los candidatos. Por ejemplo, la gestión de la emergencia del Covid en Lombardía fue un desastre y el presidente regional, Attilio Fontana (Liga) se vio obligado a reemplazarlo. En cambio, en el Lazio el consejero de Sanidad, Alessio D'Amato, ahora candidato del centroizquierda a la presidencia regional, realizó una excelente gestión en la pandemia, pero le servirá de poco. Fontana ganará y D'Amato perderá, sobre todo porque la derecha, al presentarse en coalición, se ha visto muy reforzada con la formación del Gobierno. Esto le permite a la derecha continuar gobernando en Lombardía y conquistar el Lazio, que era un feudo de la izquierda.
Meloni cumple cien días al frente de un gobierno moderado y pragmático
Ángel Gómez FuentesLa primera ministra ha echado por tierra las previsiones más sombrías con una gestión aplaudida y popular
Giorgia Meloni vive todavía una luna de miel con los italianos. Su partido Hermanos de Italia ganó las elecciones con el 26% de votos, y ha ganado consenso, con una media del 30% en intención de votos, según diversas encuestas. En su último mítin electoral en Milán Giorgia Meloni reivindicó con un duro discurso los resultados de su Gobierno: «Se acabó el Estado débil con los fuertes y el fuerte con los débiles. Queremos decirle al mundo entero que Italia ya no es la república bananera. Se pudo haber hecho, se puede hacer cumplir la legalidad». «La medida de la solidez de un gobierno es la rapidez con que logra tomar decisiones -añadió-. Por eso, las más de cien medidas ya aprobadas son el indicador de un clima completamente diferente». Concluyó Meloni planteando estas elecciones como un referéndum: «Esta votación dirá exactamente qué es lo que piensa Italia».
En juego el equilibrio en las derechas
La división de la oposición da tranquilidad a Giorgia Meloni. Pero en juego están los equilibrios en la coalición de las derechas, con Hermanos de Italia, el partido fundado por Meloni en el 2012, que desplazará completamente a la Liga y a Forza Italia en el control de lo que fue su feudo en el pasado en Lombardía. Baste indicar que en las pasadas elecciones regionales del 2018, la Liga obtuvo 29,6 % de los votos y Forza Italia un 14,3%, mientras Hermanos de Italia solo el 3,6%. Este lunes. el partido de Giorgia Meloni seguramente tendrá más votos que la Liga y FI juntos. Meloni deberá evitar las tensiones que pueden surgir en la mayoría gubernamental, si Silvio Berluscini (FI) y Matteo Salvini (Liga) ponen piedras en el camino de la primera ministra al verse reducidos poco menos que a la irrelevancia.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete