Israel retoma las negociaciones para lograr una tregua, pero Hamás desestima avances

En una de las operaciones, el Ejército logró eliminar a un militante de alto rango de la Yihad Islámica. La ofensiva tuvo lugar en un centro de comando en el patio del Hospital Al Aqsa en el centro de Gaza. «El centro de mando y los terroristas fueron atacados precisamente con la intención de minimizar el daño a los civiles no involucrados en el área del hospital», compartió el Ejército israelí. «El edificio del Hospital Al Aqsa no sufrió daños y su funcionamiento no se vio afectado».

No obstante, las autoridades gazatíes aseguraron que el ataque alcanzó varias tiendas de campaña dentro del Hospital Al Aqsa, matando a cuatro personas e hiriendo a varias, incluidos cinco periodistas. Asimismo, médicos del enclave han confirmado a la agencia oficial de noticias palestina Wafa la muerte de otras cuatro personas por inanición —entre ellas dos niños— en el hospital Kamal Adwan, con lo que ya son 34 los palestinos que han muerto de hambre o sed desde el comienzo de las hostilidades con Israel. De igual forma, las autoridades palestinas han vuelto a remarcar que son varias las personas que siguen atrapadas bajo los escombros o cuyos cuerpos están tirados en las calles, hasta donde los equipos médicos y las ambulancias no pueden llegar debido a los bloqueos de las fuerzas israelíes.

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Mikel Ayestaran | Corresponsal en Estambul

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Mientras tanto, Egipto recibe en El Cairo a una delegación israelí para impulsar una nueva ronda de negociaciones que pongan un alto al fuego en Gaza. Hamás, en cambio, aún no ha decidido si enviará representantes para participar en la conversación.

Un alto cargo del grupo palestino puso en duda este domingo la posibilidad de lograr avances para una tregua en Gaza ya que, según él, existen demasiadas diferencias entre ambos bandos. «Dudo que haya avances en estas negociaciones porque las posiciones están demasiado alejadas. [El primer ministro israelí, Benjamin] Netanyahu no es serio y no está interesado», declaró el representante del movimiento islamista palestino a la AFP, bajo condición de anonimato.

Las dos partes se han implicado en las negociaciones, mediadas por Qatar y Egipto, sobre una suspensión de seis semanas de la ofensiva de Israel a cambio de la propuesta liberación de 40 de los 130 rehenes que aún están retenidos por militantes de Hamas en Gaza después de su ataque del 7 de octubre al sur de Israel.

Hamás ha tratado de aprovechar cualquier acuerdo para poner fin a los combates y retirar las fuerzas israelíes, algo que ha descartado Israel, asegurando que eventualmente reanudaría los esfuerzos para desmantelar las capacidades militares y de gobierno de Hamás.

En la ciudad de Gaza, las fuerzas israelíes siguen operando dentro del hospital Al Shifa, el más grande del territorio. El Ejército israelí dijo que mató a unos hombres armados que se atrincheraban en el recinto médico, y que habían encontrado armamento. «Varios complejos utilizados para lanzar misiles antitanques y donde operaban francotiradores fueron atacados por aviones de las Fuerzas Aéreas» en el barrio de Rimal, cerca de Shifa, aseguraron las fuerzas armadas de Israel en un comunicado. Agregando también que habían eliminado a quince hombres armados en el centro de la Franja de Gaza y a varios en Jan Younis, cerca del hospital Al Amal.

Durante una redada en el hospital Al Shifa, Israel mató y detuvo a cientos de hombres armados de Hamás y la Yihad Islámica, aunque Hamás y el personal médico niegan cualquier presencia armada dentro de las instalaciones médicas y acusan a Israel de matar y arrestar a civiles.

Este jueves, el Tribunal Mundial ordenó por unanimidad a Israel, acusado por Sudáfrica de genocidio en Gaza, a tomar todas las medidas necesarias y efectivas para garantizar el suministro de alimentos básicos a la población.