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El cerebro de las bombas yemeníes

El saudí Ibrahim Hassan al-Asiri se convierte en el hombre más buscado para los servicios de inteligencia occidentales

Mikel AyestarÁn

Yemen vuelve a los titulares casi un año después de que Omar Faruk Abdulmutalab fuera detenido en un avión estadounidense con un explosivo adherido a su ropa interior. El joven de origen nigeriano aprendía árabe en Sanaa y tenía 25 años, tres más que ... la joven estudiante de medicina detenida en las últimas horas en la capital yemení junto a su madre acusada de realizar el envío de las dos impresoras bomba a sinagogas de Chicago. Su abogado insiste en que la chica no tiene “relación con grupos políticos o religiosos" y teme que pueda ser una “víctima porque no tiene sentido que una persona que pueda planear este tipo de operaciones dé su teléfono o su carné de identidad a una empresa de transportes". Las agencias de noticias le presentan como hija de un “ingeniero de la industria petrolera” , pertenece por tanto a una familia de clase alta como pertenecía Abdulmutalab, hijo de un reconocido financiero y ex presidente del First Bank PLC de Nigeria.

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