Biden celebra los buenos resultados de los demócratas como «una victoria para la democracia»

En un discurso en la Casa Blanca, Biden dijo: «Perdimos menos escaños en la Cámara de Representantes que en las primeras elecciones de mitad de mandato de cualquier presidente demócrata en los últimos 40 años, y tuvimos la mejor mitad de mandato para los gobernadores desde 1986».

Es cierto que estas elecciones parciales suelen ser malas para el presidente. Barack Obama llegó a calificar las suyas de «paliza». Y para Biden la resistencia demócrata es una sorpresa extremadamente grata, que da a entender que las cosas no están tan mal como parecen para él.

Con una inflación récord, de más del 8%, su partido aun pelea en el recuento por mantener la Cámara de Representantes y el Senado. Si los republicanos se hacen con una de ambas, será por una mayoría exigua e inmanejable. Lo más probable es, según los analistas, que cada partido se quede con una cámara, con los demócratas aun en control del Senado.

«Ha sido un buen día para la democracia», dijo Biden este miércoles visiblemente aliviado, en referencia a la derrota de destacados candidatos apoyados por Donald Trump que han puesto en duda la legitimidad de las elecciones de 2020. En su red social, Truth Social, Trump admitió horas antes que los resultados «no fueron los esperados», una admisión poco común por parte del expresidente.

Dijo Biden en su discurso: «Mientras la prensa y los expertos predecían una gigantesca ola conservadora, ésta no se produjo». Los demócratas llegaron hasta a hacerse con un escaño hasta ahora republicano del Senado, en Pensilvania, cuando John Fetterman se impuso al televisivo doctor Mehmet Oz, elegido y apoyado por Trump.

El presidente también reconoció que muchos estadounidenses siguen preocupados por el rumbo del país —«los votantes también dejaron claro que siguen frustrados, lo entiendo»- y dijo estar dispuesto a llegar a un acuerdo con los republicanos si controlan una de las cámaras del Capitolio. Aun así, el presidente dijo que aun hay opciones de que los demócratas aguanten.

A pesar de las encuestas de popularidad, que le dan apenas un 41% de apoyos, Biden dijo que los modestos avances republicanos no le van a hacer cambiar de rumbo. «No voy a cambiar nada de manera fundamental», dijo el presidente.

Lo cierto es que si los republicanos se hacen con el control de la Cámara de Representantes, tienen previsto iniciar investigaciones a Biden y a su familia, incluida la posibilidad del juicio político de «impeachment». Cualquiera de las prioridades legislativas de Biden quedarían anuladas, y la financiación del gobierno podría resultar difícil.