Valls sella su giro a la izquierda para ganar las primarias del Partido Socialista francés

Fuera del PS, Valls es percibido como el mejor candidato socialista a la jefatura del Estado. Pero los últimos sondeos sugieren que el exprimer ministro nacido en Barcelona podría ganar la primera vuelta del 22 de enero , pero para perder en la segunda y definitiva ronda del día 29 .

Valls ha dado un giro a la izquierda para intentar convencer a sus electores potenciales de que ha dejado de ser un «social liberal» . Pero sus principales rivales, Montebourg, Hamon y Peillon, hacen campaña recordando en todo momento su pasado de heredero de Hollande y de primer ministro y ejecutor de una política tachada de neoliberal.

Montebourg, Hamon y Peillon se presentan como los únicos capaces de representar a una «auténtica izquierda unida». La herencia del mandato presidencial de Hollande pesa como una losa sobre todos los candidatos al liderazgo socialista, con flecos «insoportables» para Valls, que Jean d’Ormesson , novelista, académico, patriarca de la cultura francesa de nuestro tiempo, resumió en su día de este modo: «Mitterrand consiguió acabar con el PCF, Hollande ha destruido el mito del socialismo salvador».

Anne Hidalgo , alcaldesa de París, una de las personalidades más influyentes entre la izquierda socialista francesa, ha hecho este balance implacable del hundimiento del gobierno socialista: «Hollande y Valls son los primeros culpables del desastre» .

Conscientes de la crisis, Valls, Montebourg, Hamon y Peillon compitieron en el debate de ayer noche en hacer costosas promesas millonarias, muy alejadas de la disciplina presupuestaria del pacto fiscal europeo.

Valls prometió invertir/gastar 8.000 millones de euros para establecer una «renta decente para todos». Montebourg prometió invertir/gastar 7.000 millones de euros para «sostener los salarios más bajos». Hamon prometió invertir/gastar 300.000 millones de euros para financiar una «renta universal para todos». Vincent Peillon prometió invertir/gastar 1.000 millardos para relanzar el crecimiento con «inversiones europeas».

Todos los candidatos al liderazgo socialista llevan varias semanas haciendo campaña con esa promesa esencial, aunque hasta ahora de poco les sirvió. Según los últimos sondeos, Valls apenas conseguiría el 10,5 % de los votos en la primera vuelta presidencial, el 23 de abril próximo. Montebourg, Hamon y Peillon podrían conseguir resultados humillantes, del 5,5 %, el 6% y el 2 %, respectivamente.

Los grandes beneficiarios del hundimiento socialista son Emmanuel Macron , social reformista, y Jean-Luc Melenchon , populista de izquierdas, que podrían relegar a cualquier candidato del PS al cuarto o quinto puesto en la primera vuelta presidencial.