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Srebrenica, la mala conciencia de Europa

La Comisión Europea llama a la rápida integración de los Balcanes en la UE

Una mujer, que sobrevivió al genocidio de 1995, y su nieta visitan las tumbas de sus familiares AFP
Rosalía Sánchez

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Radomirka Alic , de familia serbia, está casada con el musulmán Hariz Alic. La pareja, que tiene ya dos hijas, ha hecho de sus asados el restaurante «Slatki zalogaj» (Dulce bocado) un icono gastronómico de Srebrenica y juntos simbolizan la esperanza de la reconciliación, ... 25 años después de la masacre que mantiene divididos a serbios, que niegan el genocidio , y bosnios musulmanes, que piden justicia para sus familiares muertos. «Nadie nos va a devolver a los muertos y la venganza no tiene hoy sentido, pero la gente necesita que se reconozca la verdad, solo sobre esa base se puede aspirar a la convivencia pacífica», dice Hariz, en un aniversario en el que las autoridades europeas se han volcado, quizá por la mala conciencia que guarda todavía la comunidad internacional por no haber evitado aquellos hechos en suelo europeo.

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