Bótox en lugar de Barbies

Ahora, es investigada por la oficina de Asuntos Sociales y ha sido apartada de su hija, según informa la cadena estadounidense ABC . Y es que el caso ha dado la vuelta al mundo. Con total naturalidad y ante millones de ojos, Kerry Campbell justificaba la semana pasada en un programa de la ABC que le había inyectado bótox a su hija : «No me pidió exactamente que la inyectara pero sé que se estaba quejando de tener arrugas y cosas así».

A su lado estaba Britney , como se llama la pequeña. Con ocho años tiene claro que no volverá a depilarse en mucho tiempo, otra de las decisiones que tomó su madre. Sin embargo, aseguraba sentirse mejor, «más linda» tras las inyecciones. Eso sí, reconoció que le dolió e incluso llegó a llorar , pero ya se ha acostumbrado.

La oficina de Asuntos Sociales ha iniciado una investigación por unos hechos que consideran «inusuales» y las dudas sobre la formación de Kerry, la procedencia de las sustancias y el papel del pediatra. Según las últimas informaciones, Kerry habría sido apartada de su hija hasta que concluyan las investigaciones.