Grillo intenta poner orden en el caos del M5E tras el «Venezuelagate»

Héctor Schamis, profesor en la Universidad de Georgetown, analista en prestigiosos diarios internacionales, declaró el viernes a «Il Giornale» sobre este último escándalo: «No me ha sorprendido la relación del M5E con Venezuela. La diplomacia de Chávez con los petrodólares ha financiado políticos por todas partes, incluida Europa. La infiltración de Caracas ahora se empieza a sentir. La política debe escoger si está con las dictaduras».

No es de extrañar que la «bomba» informativa de ABC –así ha sido calificada en los medios italianos– sobre la financiación chavista, denominada « Venezuelagate », haya dominado la actualidad durante días en Italia . Para no reconocer sus estrechas relaciones y apoyo a Nicolás Maduro, el Movimiento 5 Estrellas ha calificado de «complot» la información de ABC, en el pasado lunes, revelando que el régimen venezolano, cuando Maduro era ministro de Exteriores, envió 3,5 millones por valija diplomática al consulado venezolano de Milán, en el año 2010, con destino a Gianroberto Casaleggio , empresario y fundador del M5E junto al cómico Beppe Grillo en 2009.

«Gianroberto era el único que comprendía la política; fallecido él (en 2016), no queda ya nadie competente en el Movimiento 5 Estrellas, que tiene una muy débil estructura organizativa». El comentario sobre el fundador del M5E lo hace Aldo Giannuli , politólogo, historiador y director del Observatorio Globalización, viejo amigo y asesor de Casaleggio. Giannulli confiesa que ve al M5E actual «dividido en dos bloques o estallará en una explosión de confeti».

Davide Casaleggio , hijo de Gianroberto, ha presentado una querella en la Fiscalía de Milán para que se añada a la investigación que han iniciado los magistrados. En un post en Facebook, Casaleggio escribió que ve «con satisfacción la apertura de la investigación abierta en Milán para que se haga luz sobre el fango lanzado contra mi padre».

Llama la atención que, hasta ahora, Grillo no ha dicho ni pío sobre el escándalo, señal clara del distanciamiento de Davide Casaleggio, sucesor del padre en la gestión de la plataforma web Rousseau usada por el M5E.

Aparte de la investigación judicial, se han activado los servicios de inteligencia, según «Corriere della Sera»: «Las dudas sobre el informe –ABC ha confirmado la veracidad– no significa que la financiación venezolana de tres millones y medio al Movimiento 5 Estrellas y, en particular, a Gianroberto Casaleggio en 2010 no se haya producido. La sospecha es que puede ser un ataque para desacreditar a los “grillini” en un momento ya muy delicado y sobre todo al gobierno italiano».

Nada más lejos de la realidad esa idea del complot al M5E o al Ejecutivo. Es una suposición descabellada. La fragilidad del Gobierno es algo que constata diariamente desde hace meses la prensa italiana, al igual que describe cotidianamente el caos del M5E. Es algo ratificado también por la opinión pública: los sondeos otorgan al M5E entre el 15 y el 17% en intención de voto, la mitad del resultado que obtuvo en las elecciones generales de marzo 2018 (32,7%).

No en vano, para evitar que el M5E estalle «en una explosión de confeti», como dice Giannulli, ha tenido que intervenir el garante del Movimiento, Beppe Grillo, para intentar poner orden entre las diversas corrientes. La intención de Grillo es crear un directorio del que formen parte cuatro o cinco personas, que representen a las diversas facciones, para dirigir el partido.

En definitiva, la exclusiva de ABC ha desatado una tormenta en la política italiana, aunque no ha sorprendido demasiado, dadas las afinidades ideológicas de los «grillinos» con el régimen de Maduro, que han servido para destruir la política exterior italiana.

«Por ahora, lo que escribe ABC debemos tomarlo en serio, aun restando neutrales», afirma Jacopo Iacobini , periodista de «La Stampa», autor de dos libros de investigación sobre el M5E. «Los lazos geopolíticos entre el M5E y Venezuela son evidentes desde hace tiempo –añade–. Los 5 Estrellas siempre se han acercado a todos los regímenes autoritarios: coqueteó con Putin y China, pasando por Venezuela e Irán. Todos los peores regímenes han sido sus amigos, políticamente».