El nepotismo, a la orden del día en la «regeneradora» Syriza

El diputado conservador Kiriákos Mitsotakis, exministro para la Reforma Administrativa, ha subido a Facebook una lista de los casos de familiares que han sido nombrados por este Gobierno para cargos públicos. El diputado acompaña la lista de «enchufados» con el siguiente comentario:«Ser pariente es más importante que ser un profesional». Y cita los siguientes casos:

El primo de Alexis Tsipras , Yorgos Tsípras, es el secretario general del Ministerio de Asuntos Exteriores . Vanguelis Kalpadákis, sobrino del ministro de Interior y Reforma Administrativa, Nikos Vútsis, es consejero en la Oficina del Primer Ministro. Su hermano, Yorgo Kalpadakis, es el director de la Oficina del Vicepresidente del Gobierno, Yánis Dragasákis.

Ifigenia Kampsidu, compañera del ministro de Justicia, Nikos Paraskevopoulu, es la presidenta del Centro Nacional de Administración Pública y Gobierno Local. Thódoros Drítsas, viceministro de Marina, está casado con Tasía Cristodulopulu, viceministra para Política Migratoria. Nikos Kunturás, hermano de la ministra de Turismo, Elena Kunturá, es consejero en su ministerio. Panayotis Dúru, hermano de la gobernadora de Atica, es ahora consejero en el Ministerio de Cultura.

Micaela Papadopulu, hija de la diputada Marina Crisoveloni, portavoz del partido Griegos Independientes, es asistente especial del Ministerio de Defensa. Y Klió Papapandaleon, esposa del secretario general de Transparencia y Justicia, fue nombrada consejera de dicho ministerio. Son solo algunos casos, pues la lista continúa.

En estos últimos cinco meses se han multiplicado los nombramientos de hijos y sobrinos de antiguos miembros del Partido Comunista y de figuras al alza de Syriza. La gran mayoría con formación que les acredita para sus cargos, pero no más que a los miles de griegos que aspiran a puestos similares en la Administración. En un país con un paro del 25,6 por ciento –que asciende al 49,7 por ciento para los jóvenes– no faltan desde luego quienes contemplan con envidia la vía rápida con la que la ideología ha enchufado en la Administración a la élite de Syriza.

Aunque el caso que más escándalo está provocando es el de Státhis Tsotsoros, presidente de la empresa semiestatal Petróleos Griegos, quien s e ha subido el sueldo de 170.000 euros anuales a 280.000 . Tras el escándalo, Latsis se vio obligado a dimitir.