Berlusconi cree en su enésima resurrección política tras ser absuelto por el Supremo

El ex primer ministro se ha liberado de una acusación infamante, que le turbaba mucho más que la condena impuesta por fraude fiscal en el Tribunal Supremo. Berlusconi pasó de verse como un líder aclamado en medio mundo, a ser un político ignorado y marginado en la esfera internacional, y cada día con menos relevancia en la política nacional.

Silvio Berlusconi festeja ahora con los suyos, que le prepararon incluso una fiesta en el Palacio Grazioli, su residencia romana, ante la que se concentraron algunos militantes de Forza Italia con banderas. «Ahora, archivada esta triste página, estoy de nuevo en campo para construir, con Forza Italia y con el centro-derecha, una Italia mejor, más justa y más libre».

Silvio Berlusconi exulta, pero tiene aún otros frentes abiertos con la justicia, entre ellos el más delicado es un proceso abierto en Nápoles por la compra de senadores. A pesar de esos obstáculos, sus más fieles seguidores confían en que sea aún capaz de vigorizar su partido Forza Italia y pueda jugar todavía un papel importante en la política italiana: «Existen resurrecciones en la religión, pero también en política», ha dicho Renato Brunetta, jefe de su grupo parlamentario en la Cámara de diputados. En cambio, la mayoría de los observadores consideran que el declinar de Berlusconi, un líder cansado y envejecido, es ya irreversible. Su mayor problema es que, dada su megalomanía y acostumbrado a ejercer el poder de forma muy personal, no ha sido capaz de nombrar un sucesor que asuma su herencia para liderar Forza Italia y ejercer una oposición creíble.

Mientras tanto, sus allegados y medios informativos afines atacan ferozmente a la magistratura de Milán. Así, el director del periódico “Libero”, Maurizio Belpietro, escribe: «Durante cinco años, la fiscalía de Milán ha indagado bajo las sábanas de Silvio Berlusconi a la caza de delitos, sus costumbres, sus relaciones y sus conversaciones han sido aireadas en la calle y el exprimer ministro ha sido descrito como una especie de enfermo sexual expuesto a la burla y al escarnio. Pero ahora se descubre que las acusaciones no pueden ser demostradas. ¿Quién resarcirá ahora a Silvio Berlusconi por un calvario de infamias?», concluye el director de “Libero”.

En el juicio se ha reconocido que hubo prostitución en los festines de Berlusconi en su residencia de Arcore, pero no hubo delito en el «bunga bunga». En cualquier caso, para muchos la imagen del ex Cavaliere estará siempre asociada a esos festines o, como el los llamaba, “cenas elegantes”. De hecho, un musical se estrenará en Copenhague inspirado en la vida de Berlusconi. Se trata de un espectáculo satírico, titulado «Berlusconi, el Musica», centrado en el poder y el machismo, ambientado en un estudio televisivo de Milán, donde el ex Cavaliere funda una compañía musical llamada «A la cama con Berlusconi».