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Alerta por terrorismo

Las fuerzas del orden de Francia, multiétnicas

Entre los policías asesinados había un tunecino y una mujer negra de la Martinica, ambos muy bien integrados

Las fuerzas del orden de Francia, multiétnicas Reuters

J. P. QUIÑONERO

Una policía negra, un gendarme árabe, un corrector de estilo musulmán están entre las víctimas de las matanzas en la redacción del semanario «Charlie Hebdo» y Montrouge. Víctimas que, de forma trágica, muestran la perfecta integración de las minorías étnicas en las fuerzas de seguridad, el Ejército y la justicia francesas. [ Sigue al minuto toda la actualidad sobre lo ocurrido en Francia ]

Clarissa Jean-Philippe (26 años) había nacido en Saint-Marie, en la Martinica y acababa de recibir su diploma de policía municipal. Trabajaba desde hacía apenas dos semanas en Montrouge, en la periferia oeste de París. Estaba en prácticas. Era una mujer alta, guapa, dicharachera.

En la mañana del miércoles, Clarissa hacía una ronda de vigilancia de rutina, cuando un fanático yihadista la asesinó a tiros y por la espalda. David Meseray, vicepresidente del sindicato CFTC –Policía municipal (sindicalistas católicos)– comenta: «Clarissa era una una mujer que despertaba una simpatía natural. Acababa de instalarse en la metrópoli tras sus primeros estudios en la Martinica. Siguió unos cursillos especializados antes de comenzar a trabajar. Los amigos nos hemos reunido con su compañero sentimental para darle ánimos».

Ahmed Merabet (40 años) nació en Túnez. Su familia se instaló en Francia hace varias décadas. Rocco Contento, responsable de la unidad SGP de la Policía de París, cuenta su historia de este modo: «Se integró con éxito en la Policía hace siete años, tenía muchos amigos, era un hombre muy jovial, con mucho don de gentes, muy conocido entre la buena gente del distrito XI. Destacó muy pronto por su carácter voluntarioso y valiente, siempre dispuesto a participar en las operaciones más intempestivas, muy apreciado por sus colegas como delegado sindical».

Ahmed Merabet intentó impedir que los asesinos huyeran tras la matanza de «Charlie Hebdo» . Fue asesinado sin piedad cuando se encontraba indefenso, caído en la calle . El vídeo atroz de esa ejecución ha dado la vuelta al mundo.

Mustapha Ourrad (60 años) había nacido en la Kabilia argelina. Agnóstico de familia musulmana, huyó de Argelia tras la guerra civil de los años 80 y 90 del siglo pasado. Instalado en París, tenía fama de ser un gran corrector de pruebas y estilo. Ese era su trabajo en «Charlie Hebdo»: corregir las faltas, lapsus y errores gramaticales de los redactores. Fue asesinado junto a los caricaturistas de «Charlie Hebdo». Clara Marabelle, secretaria de redacción del semanario recuerda a su amigo: «Viva, como lo llamábamos con cariño, era un hombre de gran cultura, buen lector de poesía. Vivía con su familia en Montreuil, que es un barrio muy complicado. Oficiaba de ángel bueno entre sus amigos y vecinos».

Tragedia y convivencia

Clarissa Jean-Philippe, Ahmed Merabet, Mustapha Ourrad... las últimas víctimas de unas minorías étnicas, religiosas y culturales que viven una triple tragedia, íntima, familiar y cívica. Tragedia siempre más honda, cuando esas mismas minorías, negras y musulmanas, esencialmente, hace años que ocupan un puesto creciente en los ejércitos, las fuerzas de seguridad y la justicia francesa. Hace apenas dos años, otra tragedia terrorista ya costó la vida a cuatro policías de origen magrebí.

Nicolas Sarkozy fue el primer jefe de Estado francés que decidió nombrar ministra de Justicia a la hija de un marroquí iletrado y musulmán piadoso, Rachida Dati. Ella vivió en su carne la tragedia de ser ministra de un gobierno conservador y hermana de un traficante de droga, encarcelado.

El primer capellán musulmán de los ejércitos franceses, Mohamed-Ali Bouharb, fue nombrado siendo presidente Nicolas Sarkozy. Un centenar de capellanes musulmanes prestan sus servicios en los ejércitos franceses. Todos ellos siguen cursos de formación cívica, en colaboración con el Instituto Católico de París. Cuando MohameAli Bouharb recibió su diploma de ese instituto, André Santini, alcalde de Issyles-Moulineaux lo celebró de este modo: «Un musulmán formado por católicos para defender los valores republicanos... ¡qué maravilla!».

También durante el mandato de Nicolas Sarkozy, el ministerio de Defensa nombró como portavoz al capitán de navío Philippe Ebanga (48 años), nacido en Duala (Camerún) diplomado en el US Naval War College, que ganó honores en la campaña de Libia.

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