«Algunos árabes pegaban a mujeres y niños para ponerse a salvo»

La soprano, que ha actuado a veces en la Scala de Milán y la Fenice de Venecia, ha contado que algunos árabes pegaron a las mujeres para ponerse antes a salvo: «Se comportaron como animales. Amenazaron a niños, pegaron a mujeres, incluida yo, que tuve que responder con uñas a los golpes. Eran árabes, pero no sabría distinguir su nacionalidad. Acudieron algunos hombres a defendernos y hubo peleas. Se oyó que aquel era el último helicóptero y que ya no volvería ninguno más, lo cual desencadenó el pánico».

Al ser preguntada por las alarmas y el comportamiento de la tripulación, la soprano griega aclara: «Me desperté por el humo. No hubo ninguna alarma, no hubo instrucciones de miembros de la tripulación. Yo cogí mi carnet de identidad y el dinero que tenía sobre la mesita y me escapé llamando a continuación a otros camarotes. El pavimento quemaba y no se podía quedar uno allí. Subí al puente más alto y allí estuve dieciocho horas. El comandante no se vio y no realizó ninguna comunicación por la megafonía».