«Decenas de detenidos» en los actos organizados por la disidencia en Cuba

Soler y Moya fueron detenidos a primera hora de la mañana, aseguró por teléfono el portavoz de la Comisión Cubana, Elizardo Sánchez. La Ccdhrn hizo un balance provisional de «entre 50 y cien» detenciones. France Presse informó de al menos 32 arrestos, mientras que el periódico digital «14 y medio» , de la bloguera crítica Yoani Sánchez, registraba una veintena de activistas detenidos.

La confluencia de las calles L y 23, en el Vedado, donde se encuentra el hotel Habana Libre y la célebre heladería Coppelia, fue escenario de una de las principales concentraciones -organizada por las Damas de Blanco- y de un buen número de arrestos. La mayoría de los activistas fueron trasladados a «comisarías u otros puntos» en vehículos policiales y se preveía que fueran liberados en unas horas.

«¡Viva los derechos humanos!», «¡Viva la libertad!», corearon los disidentes en el momento de su detención, la mayoría sin ofrecer resistencia. Después del insulto y el acoso a las Damas de Blanco y otros activistas, llegó la hora de la «contramanifestación». En el mismo escenario, según Efe, centenares de partidarios del régimen gritaron vivas a Fidel y Raúl Castro.

En Oriente, la jornada transcurrió de forma similar, con represión por parte de la policía política y «numerosas detenciones arbitrarias». La sede de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu) en Santiago de Cuba permanecía «sitiada por militares y bajo amenaza de asalto», según explicaron miembros del grupo opositor que dirige José Daniel Ferrer, expreso político de la Primavera Negra. A través de un correo electrónico, Ferrer informó en concreto sobre el «asalto a la vivienda de Melkis Faure (de Unpacu), a quien se llevaron detenida».