Maduro se rodea de cubanos y argentinos

Por ejemplo, el político mexicano-alemán Heinz Dieterich, el que fue el asesor estrella de Chávez, ya no pudo entrar más al Palacio de Miraflores porque comenzó a criticar al régimen chavista. Y menos ahora cuando vaticinó que Maduro «no llegaría más allá de marzo o abril de este año» con lo cual sepultó su posibilidad de seguir disfrutando del reconocimiento oficialista.

De los que participaron en el Centro Internacional Miranda asesorando a Chávez quedan muy pocos activos con Maduro como los españoles Juan Carlos Monedero e Ignacio Ramonet, que siguen prestando sus servicios al mandatario.

En lo militar, el ex ministro de la Defensa, Diego Molero, en junio del 2013, aseguró que el gobierno venezolano recibe asesoría militar de Cuba pero aclaró que las autoridades de la isla no influyen en las decisiones de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. Sin embargo, el disidente ex general Antonio Rivero ha denunciado la fuerte influencia de los cubanos en el sector castrense.

El general Molero cayó en desgracia con el actual presidente porque aparentemente la primera dama, Cilia Flores, lo habría pillado en su supuesto complot por lo que le ha prohibido que se acerque a su marido.

Con frecuencia Maduro viaja en secreto a Cuba para hablar con los hermanos Castro. Han renovado 56 acuerdos bilaterales en todos los ámbitos.

En lo económico Maduro parece que se ha inspirado en las políticas de la ex ministra de Economía de Argentina, Felisa Micelli, de frenar la inflación controlando las ganancias de las empresas y regulando los precios básicos de la canasta alimentaria. Las economías de Argentina y Venezuela se parecen mucho, hasta gemelas son en la inflación y el control de cambio.

La señora Felisa Micelli fue titular del Ministerio de Economía en Argentina desde el primero de julio de 2005 hasta el 16 de julio de 2007, cuando una bolsa repleta de dinero fue encontrada en el baño de su despacho.

En lo político y administrativo los halcones dominan a Miraflores. El superministro Rafael Ramírez, presidente de Petróleos de Venezuela y Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional, que junto a Maduro forman el triángulo de la pirámide del gobierno y del Partido Socialista Unido de Venezuela, cuyas decisiones no son consultadas con la base del partido.

Se sabe muy poco, casi nada de quienes son los que lo asesoran en las estrambóticas ideas del espíritu de Chávez transmutado en un pajarito que le habla y de dormir con el muerto en su tumba del Cuartel de la Montaña. Lo cierto es que esto ha proyectado una imagen muy negativa del Jefe de Estado.

Su agenda de cómo maneja el Ejecutivo y con quién se reúne se puede ver a través de su cuenta de Twitter donde confluyen los mensajes de 140 caracteres de sus 31 ministros y 111 viceministros, contando lo que hace cada uno en su día a día. La cuenta presidencial también se ha convertido en una trinchera de batalla por donde lanzan sus ataques contra la oposición.