Estados Unidos tiene un centro de espionaje en su embajada en México

Según un documento del Departamento de Defensa obtenido por la organización no gubernamental National Security Archive , el Pentágono dio soporte a un Centro de Fusión México enfocado al seguimiento de «objetivos de alto perfil». Ambos países ya contaron en el pasado con centros de inteligencia de uso común en territorio mexicano, pero éste que se menciona sólo estaba al alcance de las agenciasde Estados Unidos .

No revela si la «antena» sigue funcionandoEl informe desclasificado no entra en detalles sobre cuándo comenzó a operar esa «antena» ni si aún está en funcionamiento. Tampoco se especifica si el Gobierno mexicano estaba al tanto de su existencia ni cómo se procesaba la información, o si entre los «blancos» estaban incluidas las autoridades locales. Aunque se desconoce la ubicación del centro, el National Security Archive asume que estaría dentro de la propia embajada estadounidense en el Distrito federal, pues el documento revela que parte del apoyo del Pentágono estaba destinado a incrementar el ancho de banda de las comunicaciones en la legación diplomática .

«Lo que aflora es un esbozo de un programa de inteligencia de Estados Unidos mediante dos vías: una, una red de centros de inteligencia conjuntos integrados por personal de ambos países; otra, una instalación secreta localizada dentro de la embajada de Estados Unidos a la que los mexicanos no están invitados», dijo a Ap un analista de la ONG. Una emisora de radio mexicana, que tuvo acceso al informe, indicó que en dicho centro habría participado personal de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA), la Agencia Nacional de Inteligencia Geoespacial (NGA), la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) y el Comando Norte.

Secretaría de Gobernación

El informe tiene fecha de 2010, durante la presidencia de Felipe Calderón, en cuyo sexenio las agencias de inteligencia mexicanas se relacionaban directamente con sus pares al otro lado de la frontera: DEA, CIA, FBI o la Patrulla Fronteriza intercambiaban información con Policía Federal, Ejército, la Marina o Fiscalía. Desde que Enrique Peña Nieto asumiera el poder en diciembre de 2012, toda la información está centralizada en la Secretaría de Gobernación (Ministerio del Interior).

Días atrás, otro informe desclasificado de la NSA denunciaba la connivencia entre las autoridades mexicanas y los cárteles del narcotráfico . Las filtraciones realizadas por Edward Snowden también sacaron a la luz miles de “pinchazos” a los teléfonos móviles y correos de las máximas figuras de la política mexicana, incluidos Calderón y Peña Nieto (cuando aún era candidato).