Los mafiosos detenidos en Italia fingían accidentes para cobrar el seguro

Estas detenciones han provocado un terremoto judicial en una ciudad que vive una cruenta guerra contra la mafia. En los últimos dos años apenas ha habido 62 días sin atentados o enfrentamientos entre clanes. «Lamezia es la ciudad donde la relación entre la Ndrangheta y algunos sectores de la sociedad civil está tan arraigado que no se percibe como una desviación social», explica el fiscal antimafia Giuseppe Borrelli.

Las mafias de Lamezia Terme llegaban con sus tentáculos a casi todos los negocios y obras de construcción. Gozaban de una red de protección que incluía a las fuerzas del orden (que preferían mirar para otro lado) y funcionarios de la policía penitenciaria (que hacían de emisarios de los mafiosos en prisión).

Una de las más curiosas actividades delictivas de la mafia calabresa era la escenificación de cientos de falsos accidentes de automóvil cada año para obtener millones de euros de las aseguradoras. Con el dinero así obtenido, adquirían armas y drogas», afirmó el jefe de la Policía que llevó a cabo la investigación, Rodolfo Ruperti.

Para el fiscal de Catanzaro, Vincenzo Lombardo, uno de los clanes mafiosos, el Giampá, «era un holding criminal con tres grandes secciones: uno para la droga, otro para las extorsiones a comerciantes y un tercero para el fraude a las aseguradoras». La reconstrucción de estas actividades delictivas ha sido posible gracias a la detención del jefe mafioso Francesco Giampà, que ha decidido colaborar con la justicia, convirtiéndose en un «pentito», un arrepentido o informador de la policía. Los arrepentidos son habituales en la mafia siciliana o en la Camorra napolitana, pero no así en la brutal y cerrada Ndrangheta calabresa.

La ley del silencio estaba a la orden del día. Así lo explica el fiscal Giuseppe Borrelli: «El silencio es debido no solo al miedo, sino también a las relaciones de mutuos intereses que sabe establecer la mafia». Un claro ejemplo de colusión es la estafa a las aseguradoras: «Se trata de una estafa realizada gracias a abogados, médicos, mecánicos, médicos y peritos. Con ello, el clan Giampà no solo había encontrado un nuevo sistema de financiación, sino que también hacía cómplices a la Ndrangheta y a muchos ciudadanos».

El caso de Lamezia Terme, con ser muy grave y dramático, no es aislado. El fiscal Giancarlo Capaldo explicó a ABC que “la Nndrangheta es hoy con diferencia la organización criminal más poderosa del mundo. Ha sabido infiltrarse en los más diversos sectores en Italia y en el extranjero, incluyendo de forma especial España, haciéndose con un espacio muy importante en la economía de la globalización”. Roma es también lugar destacado de sus operaciones, junto a la mafia siciliana. Ayer mismo, fue detenido medio centenar de mafiosos que actuaban sobre todo en el litoral romano.