Los ministros de Exteriores de la OTAN se reúnen hoy para hablar de Siria y Corea del Norte

"Creo que hay una visión común sobre la manera de avanzar, con el objetivo de reanudar un diálogo político en la península coreana", explicó Rasmussen, que acaba de visitar la región desmilitarizada en el marco de su gira a Corea del Sur y Japón, a los que Pyongyang también ha amenazado con atacar, además de intereses de Estados Unidos en la región. "Comprensiblemente las declaraciones y acciones de Corea del Norte representan una enorme preocupación para ambos países", recalcó el danés. Kerry también informará, por su parte, a sus homólogos aliados de su reciente gira a Corea del Sur, Japón y China para tratar de reconducir la crisis norcoreana y lograr que Pyongyang vuelva a la mesa de negociaciones con la comunidad internacional para resolver el contencioso nuclear, algo que el régimen norcoreano ha condicionado al levantamiento previo de las sanciones de la ONU, según han explicado fuentes diplomáticas.

"Los ministros querrán discutir si tiene un pacto para nosotros y nos implica y si es así, de qué manera", han precisado estas fuentes, que han dejado claro que en caso de que Corea del Norte atacara intereses estadounidenses en Hawai o Guam el artículo 5 del Tratado de la OTAN que contempla la cláusula de seguridad colectiva para actuar en caso de que un miembro sea atacado "no se invocaría automáticamente".

La OTAN todavía confía en que Rusia acepte cooperar con ella en la defensa antimisil, un asunto en el que ambas partes mantienen divergencias, algo que abordarán con Lavrov. La cancelación de la cuarta fase del despliegue del sistema estadounidense podría "abrir una nueva oportunidad para la implicación de Rusia en la defensa antimisil", según fuentes diplomáticas.

Los ministros aliados discutirán antes "la evolución de la situación en Oriente Próximo y en África del Norte, así como sus consecuencias para la seguridad y la estabilidad de la región y para la OTAN", ha avanzado Rasmussen este viernes. Los aliados repasarán el despliegue de los misiles Patriot en Turquía cerca de la frontera con Siria para proteger a Ankara frente a posibles ataques con misiles procedentes de Siria, cuya situación "continúa representando un riesgo grave de desbordamiento regional", ha admitido Rasmussen.

Con todo, ha descartado que la OTAN modifique su postura de no intervenir en Siria ni la posibilidad de ampliar el radio de los Patriot para proteger las zonas del norte de Siria que controla la oposición, tal y como ha reclamado. Repasaremos este despliegue, pero no espero ningún cambio en nuestra postura general sobre Siria. Creemos que la forma adelante adecuada es una solución política", ha insistido. "No hay nadie que vea un papel militar de la OTAN en Siria. La única cuestión concebible sería si la OTAN puede tener un papel para asegurar que no se usan armas químicas, pero incluso éste es un tema controvertido dentro de la Alianza", han explicado fuentes diplomáticas. "Ni siquiera estamos hablando sobre un posible papel de la OTAN en la Siria post-Assad porque no hay consenso en la Alianza", han aclarado.

Los ministros de Exteriores aliados también discutirán el martes con sus homólogos del resto de 22 países que contribuyen a la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad afgana (ISAF) bajo mando de la OTAN la misión en vísperas de que las fuerzas afganas asuman esta primavera las operaciones de combate en todo el país aunque ha confiado en que se acuerden vías para garantizar la transparencia y la responsabilidad de la ayuda económica para Afganistán.

Rasmussen ha confirmado que los aliados no tomarán decisiones este martes sobre la nueva misión de entrenamiento, asesoramiento y asistencia a las fuerzas afganas que se han comprometido a mantener sobre el terreno a partir de 2015 una vez concluya la actual misión de combate en Afganistán a finales de 2014 porque todavía está "en fase de planificación" aunque ha confiado en que otros países sigan el ejemplo de Alemania de anunciar su posible participación en la nueva misión "en su debido momento".

Berlín planea dejar entre 600 y 800 efectivos a partir de 2015, pero sólo si la OTAN y Afganistán cierran un acuerdo sobre el estatus de las fuerzas. Rasmussen también ha advertido de que sin este acuerdo, que sólo se negociará después de que Estados Unidos cierre el suyo bilateral antes, no se podrán desplegar efectivos en Afganistán.

Los ministros de Exteriores también discutirán sobre los acuerdos con terceros socios para promover la seguridad, incluidos con los países del Diálogo Mediterráneo que interesa especialmente a España. Rasmussen ha calificado de "noticias positivas" el restablecimiento de los contactos entre Israel y Turquía tras "un largo periodo de tensiones políticas" por la muerte de nueve turcos que viajaban con la Flotilla de la Paz a Gaza y se ha mostrado convencido de que ello facilitará "un progreso sin duda" en la cooperación con la OTAN.

El ministro español, José Manuel García-Margallo, no asistirá a la cita en la OTAN por encontrarse de gira en Oriente Próximo. En representación de España acudirá el secretario de Estado de Exteriores, Gonzalo de Benito.