Kiko Rivera, dispuesto a transformar cuerpo, mente y alma: «Los sueños no tienen fecha de caducidad»

No es exactamente como Rocky subiendo las escaleras del Museo de Arte de Filadelfia, pero algo de eso hay. A sus 41 años, el hijo de Isabel Pantoja se ha puesto en manos de un preparador físico para emprender un desafío nada pequeño: ponerse en forma para su inmediato proyecto. «Seguimos avanzando. No hay vuelta atrás. Vamos a por todas», proclama mientras se machaca el cuerpo con sentadillas, curls y push-ups.

Kiko Rivera ha revisado de arriba a abajo todos sus hábitos pasados para cambiar de estilo de vida. Parece dispuesto a todo con tal de cumplir de sus mayores sueños de la infancia. Cada vez más asentado en su papel de creador de contenidos y con más de un millón de seguidores en su cuenta oficial de Instagram, su incursión en el mundo de los streamers no tiene vuelta atrás.

«Llevaba mucho tiempo sin entrenar de forma constante… Solo había vuelto a jugar pachanguitas de fútbol 7 con mis amigos desde noviembre», decía en uno de sus muchos abrasadores vídeos. Porque ha sido uno de los elegidos para participar en el próximo Mundial de fútbol de creadores de contenido como integrante de la selección española.

«Soñé con ser futbolista desde niño y aunque la vida me llevó por otros caminos, jamás dejé de sentirlo dentro. Con 41 años, el destino me da una oportunidad única: representar a mi país, España, en el mundial de selecciones de creadores de contenido», ha proclamado.

Algunos recuerdan aquellos tiempos infantiles en los que con su melena rubia y acompañado de su madre acudía a la vieja Ciudad Deportiva de Real Madrid calzado con sus botas y su indumentaria blanca para jugar en las secciones más pequeñas del club blanco. Por diferentes circunstancias, aquello no prosperó y la vida le llevó por otros senderos, unos más sinuosos que otros. Pero el sueño se mantuvo.

«He decidido prepararme como nunca y transformar mi cuerpo, mi mente y mi alma. Porque aún estoy a tiempo de demostrarme que los sueños no tienen fecha de caducidad», ha confirmado en otra publicación de esa especie de diario de un atleta en el que se ha convertido su Instagram. Porque el nuevo Kiko Rivera sufre, pero nunca desfallece.

Por supuesto, el nuevo plan no solo es físico, sino también incluye otros hábitos que quizá tenía descuidados en los últimos tiempos. Así, el programa también contempla una estricta dieta y, por descontado, una mejor higiene del sueño con horarios un poco más razonables.

«Lo que uno consigue al llegar a su destino nunca es tan importante como aquello en que se convierte tratando de alcanzarlo. Seguimos focus en mi preparación física», ha filosofado al respecto de esta nueva etapa de su vida con esas frases motivacionales que tanto le gustan. En otro vídeo que ha compartido en Instagram se le ve dando toques a un balón de fútbol bajo las indicaciones de su entrenador.

Para resumir todos sus esfuerzos, Kiko Rivera se ha puesto patriota y torero para enunciar: «Esto va por ustedes, por mi país, España, y por el sueño de un niño que siempre soñó con ser futbolista. Llegar al mundial en mi mejor versión es una prioridad sin olvidarme de la música que tanto me ha dado en mi vida. Música + Deporte, igual Mi felicidad». Esto ya no hay quien lo pare.