Todas las claves del guardarropa de la Reina en Argentina

A su llegada al aeropuerto metropolitano Jorge Newbery, el pasado 24 de marzo, Doña Letizia lucía un vestido recto de tono aguamarina con cinturón y sin mangas de Hugo Boss, la marca alemana que elige más a menudo, que hubiera sido protocolariamente más correcto acompañar de chaqueta o abrigo al salir de un avión de noche, en otoño y en visita oficial. Sus zapatos y cartera, impecables, eran de Magrit.

Para su primer encuentro con el presidente y la primera dama argentinos, Doña Letizia escogió una españolísima marca que está en pleno relanzamiento, Pedro del Hierro. El vestido elegido era un modelo beige de cuerpo entallado , sin mangas y con cuello a la caja, con falda de vuelo de largo midi, un atuendo discreto y sofisticado a la vez, que acompañó de nuevo de zapatos y cartera de mano en cuero rojizo de Magrit. Juliana Awada lució impecable con su mejor atuendo de toda la visita Real: un elegante vestido azul marino con lunares blancos, un tejido muy de Evita Perón, con falda larga y de vuelo, sin joyas ni accesorios. No le hacían falta.

Durante la cena oficial que tuvo lugar ese mismo día , mientras que la primera dama argentina escogía un vestido color fresa con escote ilusión y mangas francesas hacia la mitad del antebrazo, Doña Letizia se decantaba por un modelo de CH azulado, escotado y de tirantes que según la prensa argentina dejaba demasiado visibles los brazos y el décolleté de nuestra Reina. Lo curioso es que el caso contrario se dio durante la cena de gala en Madrid hace un par de años durante la visita oficial de los Macri a España, cuando Doña Letizia, de negro, coronada y con manga larga, compartía escena con una Juliana Awada muy escotada, que por el tono y los detalles del cuerpo de su vestido, parecía estar en negligée en pleno Palacio Real. Puede que con la intención de cada una de ir más en consonancia con la otra o porque siempre suele ser la anfitriona la que debe vestir de modo más modesto y prudente, Doña Letizia y Juliana Awada han cambiado las tornas de la cena de hace dos años en Madrid.

Al día siguiente, para la reunión sobre las enfermedades raras, una causa por la que aboga siempre Doña Letizia, la Reina escogió un acertado c onjunto rojo de blusa asimétrica y pantalón amplio de Zara en un tono rojo anaranjado que le favorece especialmente. El broche de abeja, remataba a la perfección su atuendo, de menos de 90 euros en total. Brillante. Juliana Awada también escogió llevar un delicioso conjunto de falda y blusa en viscosa de dibujos geométricos de Zara. Un momento estelar para la marca española, que difícilmente podría encontrar dos mejores «modelos».

Durante la recepción que los Reyes de España ofrecieron en honor de sus anfitriones, Doña Letizia escogió un precioso vestido rojizo de Roberto Torretta, de escote palabra de honor con detalle asimétrico, que presentó en una colección de hace cuatro años y que se ha reeditado para ella. La Reina lo acompañó de un clutch «intrecciato» de Bottega Veneta y zapatos del genial canario Manolo Blahnik.

Pero si hubiese que escoger el día en el que la Reina lució más «reina» y eclipsó a todas las demás señoras incluyendo a la primera dama, ese fue su último día en Argentina, durante el Congreso Internacional de la Lengua Española en Córdoba. Allí repitió un elegantísimo modelo blanco en largo midi tableado con cuadros negros de Massimo Dutti, de menos de 90 euros, acompañado de una cartera de mano de Loewe. Eso sí que es ser la mejor embajadora de la moda española.