Harry y Meghan, derroche de complicidad y estilo en su aparición más esperada

Han regresado al Reino Unido -actualmente están asentados en Canadá- para acudir a los últimos compromisos profesionales tras los que pondrán fin a una era. El primero de ellos, celebrado este jueves, es la entrega de los premios Endeavour , que se otorgan a militares veteranos heridos en acto de servicio y que recurren al deporte como elemento clave para su recuperación.

Tras varios meses alejados lo máximo posible de los focos, se han mostrado de lo más relajados en la que ellos sabían que era una fecha señalada en el calendario de muchos. Pero más allá de la química que ha mostrado la pareja a su llegada al evento, el estilismo de la exactriz de Hollywood ha sido uno de los grandes reclamos de la noche. Una vez más, ha demostrado ser un icono de estilo , enfundándose un ajustado vestido azul turquesa de manga corta y falda tubo firmado por Victoria Beckham . Su marido ha optado por el mismo color que los complementos de Meghan.

Si bien la lluvia podría haber sido un contra, los Duques de Sussex han hecho su entrada en la Mansion House, residencia oficial del Lord Mayor de la City de Londres, bajo un paraguas, agarrados del brazo y dejando para el recuerdo unas bonitas y románticas instantáneas.

Meghan y Harry también acudirán el sábado al Mountbatten Festival of Music, un concierto benéfico ofrecido por el Cuerpo de Marines Reales y que lleva el nombre del marido de la Reina, Felipe de Edimburgo . Como colofón final, su último acto programado será este mismo domingo con motivo de la celebración del tradicional servicio religioso de la Commonwealth. Allí se verán las caras, por primera vez desde que anunciaran su decisión, con la Reina Isabel II , y el resto de los Windsor.

A pesar de que los Sussex pasarán toda la semana en el Reino Unido, no será hasta el domingo cuando se produzca el ansiado reencuentro con los Duques de Cambridge, ya que Catalina y Guillermo de Inglaterra se encuentran actualmente de viaje oficial en Irlanda. Se trata de uno de los momentos más esperados de los últimos meses, pues mucho se ha estado hablando del distanciamiento entre los matrimonios que, si bien ya venía de tiempo atrás, se ha hecho más evidente tras el polémico anuncio del «Megxit».