Los vecinos de Meghan y Harry en Canadá, sus nuevos aliados frente a los paparazzi

Tranquilidad y una vida privada era lo que ambos anhelaban, pero la retirada del Príncipe Harry y Meghan Markle de la Familia Real británica no es un mero trance y mucho menos un camino de rosas . Pasados ya los momentos de mayor incertidumbre, la próxima primavera se hará oficial el acuerdo que establece su nuevo rol dentro de la institución, pero el matrimonio ya ha comenzado esta nueva etapa lejos del Reino Unido.

En un primer momento, cuando anunciaron su decisión de pasar la mitad de su tiempo en Canadá , la población del país noretamericano no mostró demasiado entusiasmo, pero sus vecinos han terminado convirtiéndose en sus mayores aliados durante su estancia en Vancouver. Y es que, a pesar de haber huido de la presión mediática británica, los Duques de Sussex están sufriendo ahora el acoso de la prensa canadiense, hasta el punto de haber anunciado medidas legales por temer tanto por su seguridad como por la de su hijo, el pequeño Archie .

Ante esta situación, informa el diario «Telegraph», los residentes de North Saanich, del barrio en el que viven ahora, les han dado la más cálida de las bienvenidas, e incluso han comenzado a velar por su seguridad ante la intromisión de las cámaras. Si bien Canadá finalmente dejará de costear sus servicios de protección el próximo 31 de marzo, sus vecinos están haciendo todo lo que pueden para echarles una mano. Así, han pedido a las autoridades que se aumente la vegetación en la zona, para evitar las miradas indiscretas. También la instalación de carteles para limitar el tráfico a los residentes de la zona.

Además, los trabajadores de los comercios que más frecuentan, como la cafetería a la que acude Harry a comer, han establecido una zona «libre» de paparazzi para evitar las cámaras, mientras que otros se encargan de que no merodeen por allí. Tal es su preocupación que se ha creado un grupo de Facebook en el que van actualizando las posiciones de los fotógrafos y periodistas en tiempo real.

Meghan y Harry están muy agradecidos por el gran apoyo, y la propia duquesa llamó personalmente a un taxista que se había negado a llevar a un grupo de turistas japoneses a su mansión. « Fue dulce, real y sincera », contó al medio citado.