La boda secreta del hermano de Máxima de los Países Bajos

ABC ha podido confirmar que el hermanísimo de Su Majestad está a punto de dar el «sí, quiero». «Juan se casa por la Iglesia en un mes. Lo hará en Viena, donde vive desde hace unos años, y asistirá toda su familia, incluida Máxima», explica a este periódico una persona próxima a los Zorreguieta. La flamante cuñada de la Reina de los Países Bajos se llama Andrea Wolf y pertenece a una influyente familia vienesa. Ya utiliza el apellido Zorreguieta, lo que hace sospechar que podrían haberse casado por lo civil. «No es una aristócrata, tampoco una multimillonaria, como algunos especulan, pero es de buena familia y una brillante asesora del nuevo gobierno de coalición en Austria , formado por socialdemócratas y conservadores», añade esta fuente.

Amigos de la pareja han revelado a este periódico que Juan Zorreguieta y Andrea Wolf se conocieron hace tres años en Buenos Aires. «Ella se crió en Viena, estudió en Londres y fue de visita a Argentina porque su padre trabajaba allí. Un amigo en común los presentó y así surgió la química», dicen. El hermano de Máxima, que estudió Ingeniería Industrial en la Pontificia Universidad Católica Argentina (donde la Reina se licenció en Economía), trabajó hasta 2012 en la capital argentina como analista de investigación de Sigma Advisors, una reconocida firma de asesoramiento empresarial.

En aquella época Zorreguieta compaginaba su trabajo con una beca en el programa «Jóvenes Dirigentes» de Nuevas Generaciones, una fundación dedicada al estudio y diseño de políticas públicas. Dicen que el primer encuentro de la pareja ocurrió precisamente durante un curso impartido en esa fundación, en 2011. Tuvo que ser amor a primera vista porque desde mediados de 2012 viven juntos en Viena.

El círculo íntimo de Máxima señala que durante muchos años la Reina intentó que sus hermanos pequeños, Juan, de 31, e Inés, de 28, se mudaran a los Países Bajos, aunque ellos siempre han preferido hacer su vida «lejos de los focos de la Corte». Sin embargo, Juan, que es padrino de bautizo de la Princesa Alexia (un honor que comparte con la Reina Matilde de Bélgica), visita con frecuencia a su hermana en La Haya, y también disfruta de sus vacaciones de invierno en Lech, el pueblo de los Alpes austríacos donde la Familia Real holandesa pasa sus vacaciones invernales desde hace cuarenta años. Fue allí donde el Príncipe Friso sufrió un accidente de esquí que lo dejó en coma profundo hasta agosto del año pasado, cuando falleció a causa de las complicaciones derivadas de la falta de oxígeno.

En el invierno de 2013, Máxima y Guillermo Alejandro, por entonces Príncipes Herederos, anexaron el vagón real al servicio regular del Alps Express –tal como Guillermo Alejandro había prometido a sus tres hijas– y pasaron una semana con las niñas, la Reina Beatriz (en sus últimas vacaciones como Monarca), la Princesa Mabel, viuda de Friso, y sus niñas. Cuentan que Juan Zorreguieta y Andrea, que por entonces ya era su prometida, se unieron a la comitiva e hicieron de niñeros de las pequeñas Princesas Reales y de las hijas de Friso y Mabel, las condesas Luana y Zaria.

La cuñada de Máxima, que ya se hace llamar Wolf-Zorreguieta – así lo acredita la web del ministerio en el que trabaja –, es tan modélica como su marido. Llegó al gobierno austríaco en diciembre del año pasado de la mano de Sophie Karmasin, ministra de Familia y Juventud y una de las promesas del Partido Popular Austríaco (ÖVP). El nombramiento de Karmasin fue recibido con escepticismo por la opinión pública de ese país debido a que la ministra de 47 años no posee ninguna experiencia en política.

La cuñada de la Reina holandesa tampoco posee demasiada destreza en política o gestión pública, aunque trabajó durante varios años en Iberoamérica como representante de la Fundación Hanns Seidel, una organización de cooperación para el desarrollo presente en 57 países y vinculada a la centroderecha en Alemania y Austria. Sin duda, una candidata políticamente correcta.