¿Crecen las orejas y la nariz con la edad?
Los expertos explican que hay de cierto o no en el aumento de tamaño de ciertas zonas de la anatomía humana
El gimnasio facial donde se entrenan los músculos del rostro para retrasar las arrugas
Seguro que alguna vez has oído decir que las orejas o la nariz crecen con la edad. Es más que evidente que tanto el rostro, como el cuerpo, sufren cambios conforme pasan los años. En la cara, además de las arrugas o ... las manchas, se produce una pérdida de volumen que altera la estructura y la forma del óvalo. En el cuerpo, lo más habitual es que con la edad se pierda tejido muscular, y aumente la grasa, provocando también cambios evidentes en la figura. Pero, ¿siguen creciendo las orejas, la nariz o incluso el pecho en las mujeres? Los médicos y cirujanos estéticos de Face Clinic aclaran qué hay de cierto en el crecimiento de ciertas zonas del cuerpo.
Orejas
Según los expertos de Face Clinic, «las orejas no crecen con la edad, hacia los 10 años tienen su tamaño definitivo. Lo que ocurre es que con el paso del tiempo la piel y el tejido subcutáneo empieza a perder sus fibras elásticas y colágeno, y por efecto de la gravedad los lóbulos se alargan y se adelgazan, si además de todo esto se utilizan pendientes pesados estos cambios pueden ser muy evidentes». Aunque no crecen, sí pueden ser más largas con el paso del tiempo. Para mejorar el aspecto de las orejas, además de la otoplastia que corrige su tamaño y su forma, hay otra intervención llamada lobuloplastia, que reconstruye el lóbulo rasgado o abierto, mediante una intervención que se realiza con anestesia local. También es posible aplicar un tratamiento de ácido hialurónico, cuando el lóbulo ha perdido volumen y aparece adelgazado.
Nariz
Otra zona del rostro que parece aumentar de tamaño con los años es la nariz. Los médicos de Face Clinic explican que «las estructuras sólidas de la nariz (huesos y cartílagos) no crecen con la edad, pero los cambios de la piel con el envejecimiento hacen que esta se descuelgue y parece que la punta ha crecido. Por otra parte, la pérdida de hueso que ocurre en la cara de forma natural con el paso del tiempo también le afecta». Otro tema que también influye es «la pérdida de volumen del maxilar superior, que hace que se pierda parte del sostén de la punta nasal, haciendo que esta caiga un poco y que, añadido al descolgamiento cutáneo, parezca que la nariz crece». Para corregir estos aspectos se puede realizar una rinoplastia ultrasónica, que ayudará a recomponer el soporte de la punta nasal.
Labios
En los labios ocurre algo curioso con los años, porque, por una parte, al perder tono, toda la zona del contorno, se hunden, se van desdibujando y se afinan. Por otra parte, según los expertos de Face Clinic «en el labio superior, por las mismas razones que la nariz, y por pérdida de tonicidad del músculo orbicular, se puede alargar con la edad, y no deja ver los incisivos al hablar o al sonreír». Para resolver estos problemas, proponen un aumento de labios con relleno o un lip-lift en el labio superior. También puedes poner en práctica algunos trucos de maquillaje.
Mamas
¿Crece el pecho con la edad? En realidad se pueden dar los dos casos, un aumento o una pérdida. «Es normal que con el paso del tiempo, los embarazos, la lactancia y los cambios hormonales las mamas crezcan, cambien de volumen en diferentes momentos de la vida, y alrededor de la menopausia haya un cambio importante de tejido glandular a tejido graso. Por lo general, muchas mujeres se quejan de un aumento de volumen del pecho, aunque en ocasiones hay una pérdida del mismo. Lo que sí se pronuncia por la pérdida de laxitud de la piel es la ptosis o la caída de la mama» aseguran desde Face Clinic. Las opciones para mejorar el busto femenino pasan desde una elevación de pecho, a una reducción o un aumento, según gustos y necesidades.
Cuerpo
En cuanto al resto del cuerpo, más que un crecimiento en sí, se suele producir un aumento del tejido graso, que se traduce en más kilos en la báscula, y un aumento de centímetros en zonas como el abdomen. Así lo cuentan desde Face Clinic: «a partir de los 30 años se va perdiendo tejido muscular y se va sustituyendo por tejido graso, en las mujeres esto se hace todavía más evidente alrededor de la menopausia. Todo esto unido al sedentarismo, los malos hábitos alimentarios, y en ocasiones a una tendencia individual de acumular grasa en localizaciones concretas, hace que parezca que hay zonas del cuerpo que crecen respecto a otras, como puede ser la zona de la cintura». Llevar un estilo de vida saludable, una alimentación baja en grasas y practicar deporte es esencial, pero si es necesario se puede recurrir a una liposucción en zonas concretas como la cintura o las cartucheras.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete