Sánchez usa el Consejo de Ministros para meter el agua en campaña

Ayer, casi en paralelo, Feijóo insistía en su propuesta mientras se conocía la convocatoria de un Consejo de Ministros Extraordinario que se espera que apruebe la ampliación de ayudas directas y de la PAC para paliar los efectos de la sequía. Aunque el martes hubo Consejo de Ministros, el Gobierno quiere darle mucho foco a esta cuestión y ha buscado un foco específico. Hay muchas plazas electorales en juego y en muchas de ellas el problema del agua es ya estructural.

La previsión es que el Ejecutivo apruebe la ampliación de ayudas directas y de la PAC. Para el PP muchas de estas cuestiones llegan tarde y se abordan además sin trabajo previo con las Comunidades Autónomas. Ayer Feijóo reclamó a Sánchez que convoque «de una vez» una Conferencia de Presidentes para abordar esta situación. «Cómo mínimo se tendría que haber reunido con los presidentes autonómicos hace un año. Sólo se ha dedicado a enfrentarlos entre sí. Ahora, a cinco meses de las generales, y en mayo, Sánchez se acuerda de que hay que atajar la sequía en España», reprochaba Feijóo.

El presidente del PP tiene un grupo de trabajo específico para esta cuestión. Ayer, en una intervención ante el IV Foro Internacional Expansión, insistió en la necesidad de alcanzar un gran pacto sobre agua y para hacer frente a la sequía. Sus propuestas se incluyen en el Plan sobre el Agua, que contempla la creación de una «autoridad nacional del agua», la fijación de una «red estratégica del agua», y la inversión urgente de entre 40.000 y 50.000 millones de euros en infraestructuras hidráulicas. Feijóo apremia al Gobierno a abordar esta cuestión porque «no puede pasar ni un año más sin una propuesta concreta, y sin establecer un plan de agua» ante lo que ha definido como una situación de emergencia. «Llevo más de un mes planteándole un pacto nacional del agua. Desde el año pasado hay comunidades autónomas que han establecido un plan y el Gobierno dice que va a hacer un Consejo de Ministros mañana. Estamos en mayo, planteando un problema estructural que llevan cinco años sin acometer».

La cuestión del agua es fundamental por ejemplo en la Región de Murcia, una de las plazas hegemónicas del PP, que se ve muy afectada por la decisión del Gobierno de recortar el Trasvase Tajo-Segura. Esto incide también especialmente en la Comunidad Valenciana y singularmente en la provincia de Alicante y es un dolor de cabeza para Ximo Puig.

Frente a este planteamiento de Feijóo desde las filas socialistas argumentan con las decisiones que ya ha tomado el Gobierno. Se refieren en primer lugar a los 450 millones de euros aprobados por el Consejo de Ministros el 15 de marzo del pasado año. A los que se sumarían unos 650 millones de euros en ayudas directas extraordinarias ya pagadas a sectores ganaderos, cítricos y paliar el coste de fertilizantes.

La última medida adoptada ha sido la reducción en el sistema de módulos del IRPF que el Gobierno asegura que alcanza a 800.000 agricultores y ganaderos. Durante la sesión parlamentaria en el Congreso de los Diputados la cuestión del agua y la sequía producía un duro choque parlamentario entre la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, y Vox.

En la respuesta a la interpelación de Vox sobre las medidas del Gobierno para desarrollar infraestructuras hídricas nacionales para garantizar el abastecimiento de agua, Ribera se refirió a Vox como «unos ignorantes» por afirmar que el Gobierno se dedica a destruir presas «como una y otra vez repiten machaconamente, intentando generar un miedo y una alerta que no es real». La vicepresidenta tercera explicaba que este 2023 ha llovido la mitad de lo normal y la previsión de reducción de disponibilidad de agua en España en 2050 es «enormemente alarmante», ya que se espera un 14 por ciento menos de precipitación.

El PP también reprochó a Ribera por no haber «dado ninguna solución» contra este problema durante la Mesa de la Sequía que se reunió «hace unas semanas» y que ahora haya decidido realizar un Consejo de Ministros extraordinario este jueves: «Por la mañana pegada de carteles y por la tarde medidas especiales de sequía», ironizó el diputado del PP César Sánchez. Desde las filas populares se reclama al Gobierno de Sánchez que esas medidas no se centren en la reducción de la demanda.