Sánchez inicia su visita a China con «voluntad constructiva de diálogo» pese a la tensión comercial

El de hoy supone el segundo viaje de Sánchez al gigante asiático en apenas quince meses, una frecuencia inusitada en el histórico de intercambios. «El año pasado dimos un nuevo impulso a la relación con avances en grandes ámbitos de interés mutuo como es el sector agroalimentario, el turístico y el cultural», ha señalado.

Si aquella cita estuvo marcada por la crisis geopolítica desatada por la invasión rusa de Ucrania, en esta ocasión la guerra comercial en ciernes entre la Unión Europea y China opaca cualquier otro tema. Ante la imposición de aranceles provisionales a sus coches eléctricos, el régimen ha respondido amenazando al sector del cerdo español.

Sánchez, sin embargo, aterriza dispuesto a mostrarse complaciente. «Incluso en aquellos asuntos en los que nuestras posiciones no coinciden plenamente mantenemos una voluntad constructiva de diálogo y de cooperación, comprometidos con el desarrollo de una agenda positiva en la búsqueda de soluciones consensuadas en beneficio de ambas partes», ha defendido esta mañana.

«El orden internacional atraviesa una época de enorme volatilidad, se ponen en cuestión certezas que habíamos dado por sentadas en las últimas décadas. En Europa estamos inmersos, por desgracia, en el tercer año de la guerra de agresión desencadenada por Rusia contra Ucrania. En Oriente Medio se vive una escalada de tensión y de violencia de una intensidad sin precedentes. Mientras tanto, cobran nuevas dimensiones desafíos globales como la emergencia climática, la transformación digital o la lucha contra la desigualdad».

Ante este convulso contexto, el presidente ha incidido en la involucración necesaria del gigante asiático. «Está en nuestra mano dar una solución de manera conjunta a estos problemas y la mejor respuesta a este contexto complejo es más diálogo y más intercambio de ideas. España y China mantienen unos lazos sólidos».

En ese sentido, Sánchez ha adelantado la firma de un acuerdo de colaboración conjunta en materia de desarrollo verde. «Me alegra poder decir que [la lucha contra el cambio climático] es uno de los principales espacios de colaboración. Los dos países apostamos por una transición hacia nuevas fuentes de energía de forma justa».

El presidente ha celebrado asimismo la inauguración mañana de un nuevo centro del Instituto Cervantes de Shánghai, «un hito de gran valor simbólico que hace realidad una aspiración histórica de la principal institución para la proyección internacional de la lengua y la cultura española».

En las próximas horas Sánchez mantendrá sucesivos encuentros en el Gran Palacio del Pueblo con Li Qiang, primer ministro, y Zhao Leji, presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional y como tal tercera autoridad del Estado. Por último, se entrevistará en la residencia Diaoyutai con Xi Jinping, quien ofrecerá una cena reducida en su honor.