Las Policías vasca y navarra también ganan terreno a los Cuerpos nacionales

En todos los casos, además, hay un denominador común: el Cuerpo autonómico concernido carece de medios suficientes para asumir la nueva competencia, algo que ellos mismos denuncian y que sin embargo no es tenido en cuenta por los responsables políticos.

Mandos de la Policía vasca ya han advertido en varias reuniones que no cuentan con personal suficiente para hacerse cargo con garantías de la seguridad de puertos y aeropuertos. Especialmente delicada es la situación de los puertos, donde hay serias dudas de que la Ertzaintza tenga capacidad para hacerse cargo de sus nuevas atribuciones en condiciones razonables.

En Navarra, la cesión de la competencia de Tráfico en favor de la Policía foral -en este caso en detrimento de la Guardia Civil- también plantea muchos problemas por falta de medios materiales y humanos del Cuerpo autonómico. En este caso, aunque el traspaso es ya un hecho desde el puente de noviembre, la Benemérita sigue custodiando las carreteras navarras y se espera que la situación se prolongue incluso años.

En el fondo del debate está el modelo de seguridad que se quiere en un país como España en el que hay tres policías autonómicas integrales, lo que provoca en ocasiones conflictos con la Policía y la Guardia Civil por cuál es el Cuerpo competente en determinados casos. Se vio, por ejemplo, el 17 de agosto de 2017 con ocasión de los atentados yihadistas de Cataluña.

Los profesionales mantienen que si se les deja trabajar sin interferencias políticas los conflictos se reducirían al mínimo y la coordinación y cooperación estaría garantizada en más del 90 por ciento de los casos. Lo que rechazan es que decisiones sobre cesiones de competencias, en lugar de hacerse desde planteamientos técnicos, se basan en criterios políticos.

Para el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y también para Justicia Policial (Jupol), mayoritarios en el Cuerpo, las cesiones de competencias son consecuencia de las necesidades políticas del Gobierno. El SUP afirma que «la Policía Nacional no puede ser usada continuamente como moneda de cambio en todo tipo de acuerdos políticos». Por su parte Jupol considera que la decisión de ceder la seguridad de puertos y aeropuertos de Cataluña a los Mossos d'Esquadra es mantener «la política de desmantelamiento de la Policía Nacional en Cataluña«.