Podemos copia a Chávez y Maduro el nombre de 'Precios Justos' para su supermercado público

El proyecto, llamado «Precios Justos», fue anunciado durante el acto 'Sectores estratégicos para transformar', organizado por la formación morada en Cáceres, y levantó rápidamente una gran polémica por su parecido con una ley venezolana. Resulta que el nombre de la medida es exactamente el mismo que el de una impulsada por Hugo Chávez en 2011 para fijar los precios máximos en los supermercados.

Por aquel entonces, el dictador prometió precios justos «eliminando la plusvalía capitalista» y puso como ejemplo que el arroz se vendía un «40 por ciento por debajo» de lo que lo hacía la antigua Éxito, la primera cadena de a la que el dictador expropió un local. Lo hizo con el argumento de que incurría reiteradamente en especulación con los precios.

No son pocos quienes ven en esta medida, una más de tantas evidencias de la clara línea chavista que sigue la formación morada. Más si cabe, teniendo en cuenta que Podemos lleva tiempo en plena ofensiva contra las principales cadenas de distribución en España. Especialmente, contra Roig, a quien Belarra llegó a tildar este domingo de «capo», al concentrar Mercadona el 25 por ciento de la cuota nacional.

También la líder de Podemos insistió en que la intervención del Estado en la economía «es lo que mejor funciona», y subrayó que España necesita una farmacéutica pública, una tecnológica pública y una empresa eléctrica pública, además del, para ella, imprescindible supermercado, «que baje los precios y proteja a los pequeños productores».

La Ley que de Precios Justos venezolana fue impulsada por Chávez y afianzada por Maduro. La medida pretendía limitar los márgenes de beneficio para los comerciantes al 30 por ciento y ayudar a mantener la recién creada red de supermercados públicos de Venezuela, llamados Abasto Bicentenario.

Aquella red, desaparecida en 2019, fue deficitaria durante los más de diez años que permaneció abierta y con su cierre dejó a 10.000 trabajadores en la calle. Además, desde 2015, Maduro añadió una 'categoría especial de protección' en la cesta básica de la compra, con la que su Gobierno escogía qué productos eran necesarios y cuáles no. Algo parecido, si cabe, a las cartillas de racionamiento que tantos regímenes impulsan.