La borrasca Ciril deja estampas invernales en el norte en pleno mes de abril

A primera hora la cota de nieve se situaba en torno a los 300 metros. Esto ha hecho que en Vitoria y en Pamplona los primeros copos de nieve sorprendieran a muchos cuando se dirigían a sus puestos de trabajo. Las temperaturas se han situado en torno a los 10 grados y se han registrado intensas granizadas en algunos momentos del día, lo que ha obligado a rescatar en abril abrigos más propios del invierno.

Las estampas invernales, sin embargo, no han causado excesivos problemas en las carreteras . Algunos conductores se veían sorprendidos por una repentina nevada en el puerto de Altube , en Álava, aunque las máquinas quitanieves han conseguido despejar rápidamente la carretera. A lo largo del día también se han registrado complicaciones en los puertos de Opakua y de Herrera aunque por la tarde ya estaban abiertos a todo tipo de vehículos. Y la autopista AP-15 que une Navarra con Guipúzcoa ha permanecido cortada durante tres horas debido a la nevada aunque finalmente ha podido restablecerse la circulación.

En cualquier caso, los servicios de emergencia piden prudencia a la hora de circular por la red viaria vasca. Las granizadas están siendo intensas en muchos puntos. Además, la noche se prevé complicada ya que las bajas temperaturas podrían provocar placas de hielo en algunos puntos.

Lo de este viernes no ha sido más que un preludio de lo que se espera para el fin de semana. La cota de nieve amanecerá este sábado, de nuevo, rondando los 200-300 metros. A lo largo del día se espera que suba hasta situarse en torno a los 500 metros. Además, está activado el aviso amarillo porque se prevén intensas precipitaciones. Por precaución, tanto Guipúzcoa como Álava han suspendido el deporte escolar al aire libre previsto este fin de semana.

De cara al domingo , los pronósticos hablan de una pequeña mejora . El día amanecerá aún con la cota de nieve en torno a los quinientos metros. Pero se espera que las precipitaciones sean algo más débiles por la mañana y que por la tarde nos podamos olvidar, por fin, de andar con el paraguas a cuestas.