La investigación se inició a principios de año, cuando una vecina de Murcia denunció ante la Guardia Civil estar siendo víctima de acoso telefónico.
La mujer refirió haber recibido, en un corto espacio de tiempo, más de 150 llamadas desde un número oculto. A cualquier hora del día esas llamadas perturbaban su tranquilidad con comentarios de índole sexual, haciéndole saber que vigilaba sus movimientos o manteniéndose simplemente en línea escuchándola.
Agentes de la Guardia Civil de los equipos Arroba, especializados en la investigación de ciberdelitos, se hicieron cargo de la denuncia con el objetivo de identificar al supuesto acosador que se ocultaba bajo el anonimato.
Los investigadores recabaron información acerca del número de llamadas, su insistencia, las referencias que hacía el interlocutor y otros detalles relevantes que pusieron de manifiesto la situación de acoso a que estaba sometida la víctima.
Todos estos indicios fueron puestos en conocimiento de la autoridad judicial, que otorgó el correspondiente mandamiento judicial dirigido al operador de telefonía móvil.
La operación 'Queramin' ha finalizado con la identificación y localización de un joven, que ha sido detenido como presunto autor de los delitos de coacciones y acoso en el ámbito de la violencia de género.
Se trata de un joven que mantuvo cierto vínculo sentimental con la víctima, por lo que especialistas en la protección y el asesoramiento a las víctimas de violencia de género de los equipos VIOGEN de la Guardia Civil han activado el correspondiente protocolo establecido para estos casos.
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