La nueva Ley de Patrimonio Cultural protege bienes industriales o tecnológicos e incluye los inmateriales

La norma se adapta a la sentencia del Tribunal Constitucional que declaró nulos ocho artículos de la anterior versión

Centro Canalejas, cuya remodelación desató la polémica entre defensores del patrimonio y administraciones Guilermo navarro

El Gobierno regional ha aprobado, y enviará ahora a la Asamblea para su tramitación, el proyecto de Ley de Patrimonio Cultural. Un texto legal que moderniza el último, de 2013, y además lo adapta a la legalidad, ya que aquel se enfrentó a una ... sentencia del Tribunal Constitucional que tumbó ocho de sus artículos. La nueva redacción ha tardado años en concretarse y en ella, la Consejería de Cultura, que dirige Marta Rivera de la Cruz, asegura haber contado con la participación de asociaciones del sector.

La sentencia del Constitucional echaba abajo varios artículos por invadir competencias estatales en unos casos, o por permitir la segregación parcelaria de bienes protegidos, entre otros. El Gobierno regional extiende ahora las figuras de protección, avanza en la regulación de nuevos patrimonios como el industrial o el etnográfico, e introduce instrumentos para salvaguardar estos bienes.

Para su redacción, aseguran en la Consejería, se ha contado con la participación del Consejo Regional de Patrimonio Histórico y de las asociaciones más representativas en este ámbito cultural. Estas son sus claves.

Inmaterial

La Ley amplía la noción de patrimonio cultural, e introduce la regulación sobre los denominados nuevos patrimonios, como pueden ser el inmaterial -en el que se citan, por ejemplo, la tauromaquia-, el industrial, el etnográfico, el científico y el tecnológico.

Participación ciudadana

El proyecto de Ley madrileño potencia la participación ciudadana: reconoce el papel de la sociedad civil e impulsa la colaboración ciudadana en la conservación y puesta en valor del patrimonio. Cada vez más entidades vecinales o sociales se han incorporado a proyectos de protección del patrimonio en distintos puntos de la región. Además, la Ley también regula el acceso público a los registros de bienes culturales protegidos.

Nuevos instrumentos

En la nueva norma se recogen nuevos instrumentos y figuras de protección que garantizan la conservación del patrimonio. Se establecen tres niveles de protección de Bienes Culturales: junto a los Bienes de Interés Cultural (BIC) y los Bienes de Interés Patrimonial (BIP), que ya existían, introduce la figura de los Bienes Catalogados.

Se incluyen a la vez nuevas categorías de bienes inmuebles, como la de sitio científico y la de itinerario cultural, y se crea el Catálogo de patrimonio cultural de la Comunidad de Madrid, que pasa a incluir todo tipo de bienes culturales protegidos, y no sólo los bienes inmuebles como en el actual Catálogo Geográfico Regional.

Garantes

La Ley de Patrimonio Cultural potencia el papel de la Comunidad de Madrid y de los ayuntamientos en el proceso de inspección, de manera que les convierte en garantes de la protección del patrimonio. También se amplían y gradúan las posibles causas de sanción y su cuantía.

Más seguridad jurídica

Otra de los objetivos de la nueva Ley es mejorar la seguridad jurídica y la claridad de los procedimientos de protección: el inicio de actuaciones se publicará en el Portal de Transparencia regional, y expone su criterios y los de intervención en el entorno de los bienes inmuebles.

Profesionalidad

Se establece que las intervenciones en BIC y BIP requerirán de un proyecto técnico suscrito por un profesional competente, y las que se hagan en bienes muebles catalogados serán realizadas por expertos cualificados en conservación y restauración. La dirección de las actividades arqueológicas y paleontológicas recaerá en una persona cualificada en la materia.

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