La mujer acuchillada hasta la muerte en Getafe fue perseguida por su asesino en plena calle

Pese a que el crimen ha tenido lugar un sábado a mediodía y en la vía pública, la lluvia y la mala climatología han provocado que la zona, repleta de chalés adosados y parques, estuviera prácticamente desértica. Ello, sin embargo, no ha impedido que algunos testigos observaran a un hombre perseguir por la vía pública a la mujer, sin saber entonces que este terminaría por acabar con su vida. Los agentes investigan ahora el tipo de vínculo entre ambos.

A su llegada, los facultativos del Summa 112 han encontrado a la mujer en parada cardiorrespiratoria, de la que ya no saldría pese a la maniobras de reanimación cardiopulmonar practicadas. La víctima presentaba heridas de defensa en los brazos, lo que evidencia que trató de zafarse de su atacante antes de ser asesinada. Hasta el lugar también se ha desplazado la Sección de Delitos Violentos (DEVI) de la Policía Científica, para realizar una inspección ocular de la escena del crimen; y la Policía Local de Getafe. La presencia de la mujer este mediodía en el enclave es un misterio: los vecinos han asegurado no saber nada, en un punto donde además de las hileras de viviendas unifamiliares hay una iglesia y una residencia de mayores.

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Poco después de conocerse la triste noticia, la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, publicaba en sus redes sociales que la Policía investiga este crimen «por posible violencia machista» y confirmaba que su asesino «habría huido». «En estos momentos tan difíciles todo nuestro pesar y apoyo está con su familia y amigos. Seguimos recopilando más información», añadía la regidora en su perfil de X (antiguo Twitter). Mientras que la portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, Mónica García, pedía no dar «ni un paso atrás» ni «mirar hacia otro lado» frente la violencia machista.

Este suceso no ha sido el único de la jornada saldado a cuchilladas en Madrid. A las seis de la mañana, siete personas de entre 18 y 45 años han resultado heridas de diversa consideración tras una reyerta en la discoteca Nazca, ubicada en el corazón financiero de la capital. La Policía Nacional ha detenido a cuatro clientes, todos españoles, acusados de un delito de lesiones graves tras arremeter contra los porteros con armas blancas.

De hecho, de los siete heridos tres son controladores del local, el más grave apuñalado en la parte izquierda del abdomen (y conducido con preaviso hospitalario a la Paz), el segundo alcanzado en la ingle y el último aquejado de un mordisco en el brazo. Por su parte, el autor de las puñaladas ha sufrido un traumatismo craneoencefálico y facial, por lo que el Samur-Protección Civil lo ha tenido que trasladar en estado grave al hospital Gregorio Marañón, ya en calidad de detenido. En principio, se descarta que el asunto esté relacionado con un tema de bandas.